Hombres de la región tendrán casi 4 años más de vida al 2020
Estudio. Así se desprende del Enfoque Demográfico de Género publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Los hombres que nazcan en la región en 2020 vivirán -en promedio- casi cuatro años más que quienes nacieron en en 2002. Así se desprende del Enfoque Demográfico de Género publicado esta semana por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), que muestra además una ligera disminución en la brecha de Esperanza de Vida al Nacer (EVN) que separa a hombres y mujeres en el país.
La EVN es un indicador que expresa el número de años promedio que viviría un grupo de personas nacidas el mismo año, si las condiciones de mortalidad de las personas del área evaluada se mantuvieran constantes hasta la muerte.
"Es una medida resumen sobre el nivel de la mortalidad que expresa el promedio de años que se espera viva una persona bajo las condiciones de mortalidad del período en que se calcula", explicó Margarita Fuentes, magister en Salud Pública y Economía de la Salud y asesora del Programa Magister en Salud Pública de la Universidad de Antofagasta.
De hecho -agregó Fuentes- "es un indicador sintético por excelencia para caracterizar las condiciones de vida, salud, educación y otras dimensiones sociales de un país o territorio. Por eso es uno de los indicadores fundamentales seleccionado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para medir el desarrollo humano de los países, aunque no necesariamente se traduce en mejor calidad de vida".
brecha
Desde una perspectiva global, África y América del Norte son los continentes con las EVN más baja y alta, respectivamente. La brecha entre ellos es de aproximadamente 20 años para los hombres y 21 para las mujeres.
En el caso de Chile la EVN al 2015 se estima en 76,5 años para los hombres y en 81,7 años para las mujeres, según la actualización de las proyecciones de población 2002-2020 (INE, 2014).
Al 2020 la esperanza de vida al nacer aumentaría a 77,4 años y 82,2 años para los hombres y mujeres, respectivamente.
En la región de Antofagasta las mujeres que nacieron en 2015 vivirán en promedio 5 años más que los hombres, aunque la tendencia indica que esa diferencia se está estrechando.
En la zona, la EVN para los hombres pasará de 75,73 en 2015 a 76,68 en cinco años más. Una tendencia similar se observó para las mujeres que pasarán de 80,21 a 80,83 años en 2020.
Se trata de un salto importante considerando que en 2002 este indicador marcaba sólo 72,71 y 78,48 para hombres y mujeres respectivamente.
cifras
La cifras del INE revelan además que Chile tendría una leve tendencia a disminuir esta brecha de 2015 al 2020, según las últimas proyecciones de población (de 5,2 a 4,8 años, respectivamente).
"Esto puede ser explicado pues si bien la EVN de las mujeres es superior a la de los hombres en 2015 y 2020, los hombres aumentarían su EVN más que las mujeres", advierte el informe.
Finalmente, este informe confirma que el proceso de envejecimiento demográfico de la población nacional tanto femenina como masculina "exige medidas que deben ser tomadas a través de políticas públicas, para satisfacer las necesidades de un volumen de población cada vez mayor".
Según las proyecciones de población, en 2015 habría 1,2 millones de hombres adultos mayores versus 1,5 millones de mujeres de 60 años o más (representando 14,9% del total poblacional), aumentando al 2020 a 1,5 millones de hombres y 1,8 millones de mujeres.
En esa línea, la seremi de Salud, Lila Vergara destacó que el ministerio de Salud -en particular el Programa de Salud del Adulto Mayor-, se propuso fortalecer el trabajo interministerial e intersectorial colaborando y participando en la Política Integral de Envejecimiento Positivo del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama).
apoyo
Se trata de una Política Nacional de Promoción de la Autonomía, Autovalencia y Prevención de la Dependencia en las Personas Mayores, cuyo propósito es contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas adultos mayores, prolongando su autovalencia, con una atención integral en base a un modelo de Salud Familiar y Comunitaria.
La autoridad detalló que -en el marco de este programa- para la región de Antofagasta se destinaron $ 227 millones, los cuales fueron distribuidos a las comunas de Antofagasta y Calama bajo convenio con las corporaciones municipales de desarrollo respectivas.
Para Antofagasta se destinaron $ 159 millones, mientras el saldo ($ 68 millones) fue asignado a Calama. "Los recursos están destinados a la contratación de duplas profesionales entre kinesiólogos, enfermeras, psicólogos y terapeutas ocupacionales", explicó la autoridad.
La meta es ingresar al programa a 6.450 adultos mayores.