Ayer se cumplió un año desde la inauguración del estadio Zorros del Desierto
PENDIENTES. Autoridades resaltan el aporte del recinto y recuerdan lo complejo que resultó su entrega definitiva.
Fueron 26 meses desde que a fines de febrero de 2013 comenzaron las obras del estadio municipal de Calama, uno de los nuevos recintos deportivos con que el gobierno pasado quiso implementar una política de obras modernas para el deporte pero que en caso de nuestra comuna, tuvo trabas administrativas, retrasos, problemas de autorización para partidos oficiales y muchas idas y venidas de autoridades locales para ponerlo a disposición de Cobreloa.
Uno de los principales actores en la lucha por conseguir los permisos definitivos y la entrega de recursos para trabajos pendientes fue el gobernador de la provincia El Loa, Claudio Lagos.
La autoridad recuerda que "fue prácticamente un parto. Porque por un lado estaba la presión de la comunidad por tenerlo disponible, las ganas de nosotros de propiciar que Cobreloa jugara la definición por su permanencia en Primera A en su estadio nuevo y por el otro, el cumplir con todas las exigencias que se tenían, además de finiquitar las obras, que en cada inspección nos jugaba un informe en contra".
Lagos, que incluso viajó a Santiago para intervenir con autoridades del IND recuerda que "de alguna forma, sabemos que una parte de nuestro sueño no se cumplió porque Cobreloa descendió y no pudo conseguir subir a primera en el primer año del estadio, que nos habría gustado mucho. Pero más allá de lo deportivo, nos queda la sensación de que esta es una obra ícono en Calama y es un legado que quedará por mucho tiempo".
Hoy, el estadio municipal de Calama, "Zorros del Desierto" -con capacidad para 12 mi personas y que posee estándares FIFA- es considerado uno de los cinco en Chile que cumple con todas las medidas que requiere Estadio Seguro para espectáculos deportivos aunque aún tiene trabajos pendientes como la implementación del ascensor de servicio y arreglo de baños públicos.
3 fechas de inauguración facilidad tuvo el recinto hasta que se entregó en abril de 2015.
12 mil millones de pesos costó la obra, con dineros que salieron desde el IND y el gobierno regional.