72 candidatos tras cargo de concejal
La comunidad se pregunta cuál será la motivación de cada uno de ellos para ocupar un cargo en el Concejo Municipal. El alto número de postulantes a concejales obliga a la electores a involucrarse y conocerlos para poder elegir a los mejores y a quienes tienen las capacidades.
Cuando ya se acercan las elecciones municipales, donde cada comuna deberá elegir a su alcalde y concejales, comienzan a surgir los candidatos. Aunque en la nómina de alcaldes aparecen muy pocos nombre nuevos, en la nómina para el Concejo Municipal surge un gran número de postulantes, que en Calama llega a 72, en San Pedro de Atacama 36 y en Ollagüe 32.
La primera pregunta es si la comunidad conocerá a estos postulantes, si son representativos y si será posible conocer sus propuestas antes que lleguen las elecciones en octubre.
Otra interrogante es si todas esas personas tendrán verdaderamente una motivación de servicio a la comunidad, debido a que en este último tiempo se han podido conocer muchos casos de hombres dedicados a la política que han mostrado otras motivaciones muy distintas. También somos testigos como muchas personas de la "farándula" se interesan en ocupar un sillón municipal, sabiendo que sus conocimientos de administración para el servicio público es casi nulo.
Por esta razón llama la atención que en el poblado de Ollagüe que según el censo son 332 habitantes, existan 32 personas interesadas en ocupar un cargo de edil. O en San Pedro, donde la población de la comuna alcanza apenas a las cinco mil personas tengan 36 candidatos a concejal.
Esta cifra récord debe llevarnos a reflexionar sobre cómo poder elegir a los más idóneos, más allá de sus visiones partidistas y de sus aspiraciones personales. Se requieren servidores públicos, que no piensen el cargo como un sueldo extra por participar en algunas reuniones mensuales, que no piensen en que podrán viajar por el mundo, que no influirán en decisiones del gobierno comunal para favorecerse ellos o a familiares o amigos.
Se requiere que la población pueda conocer bien a estos candidatos, que su afiliación política no sea suficiente motivo para votar por ellos.
Hoy más que nunca se requiere de hombres y mujeres que quieran esta tierra, que luchen por las buenas iniciativas, que anhelen una comuna con una mejor calidad de vida y que sean justos.