Karen Cereceda Ramos
Es sin lugar a dudas el tema del momento, no sólo en el ámbito político, sino que también en el social. La descentralización se tomó la agenda nacional, luego de toda la discusión y posterior aprobación en la comisión de Gobierno Interior del Senado que aprobó el proyecto de ley para la elección de los intendentes por votación popular, los que pasarían a llamarse gobernadores regionales y que de seguir con los trámites constitucionales en los plazos establecidos podrían elegirse el próximo año.
Hoy, en el pleno de la Cámara Alta se votará en particular este proyecto, que de ser aprobado dejará llano el camino para que en 2017 la ciudadanía elija a la máxima autoridad de la región.
Para ser aprobado un quórum del 3/5 de los senadores, es decir 22 votos.
Pero la descentralización es algo que va más allá de la elección popular de la autoridad regional, de hecho ello es solo el primer paso para una serie de etapas que debieran sucederse paralela y posteriormente para generar esta nueva situación país.
"El proyecto de elección de intendentes la hemos declarado la reforma madre del proceso descentralizador", comenta Heinrich von Baer, destacado académico y presidente de la fundación Chile Descentralizado y de la Comisión Presidencial de Descentralización.
El experto agrega que, tal como lo demuestra la experiencia comparada en otros países, la primera y principal reforma para iniciar un proceso de descentralización real, efectivo y creíble es la de elección de autoridades regionales "que en Chile se viene prometiendo hace más de 17 años desde la elección el año 99".
Competencias y fondos
Von Baer explica los próximos pasos en el proceso de descentralización tiene que ver con el tema administrativo donde se deben definir las facultades que debe tener esta nueva autoridad.
"La ley de traspaso de competencias deberá tramitarse con mayor urgencia y de acuerdo a lo que comprometió el gobierno a esta ley se le pondrá carácter de suma urgencia para que avance mucho más rápido y no recién al final de la ley de elección de autoridades", dijo el experto.
El otro paso que debe llevarse a cabo, ya sea posterior o paralelamente, es de orden fiscal que en definitiva tiene relación con el presupuesto que debe contar esta nueva autoridad.
En este aspecto Heinrich von Baer explica que para que estas nuevas administraciones funcionen bien, y sea verdaderamente descentralizado, el presupuesto debe equivaler de aquí al 2020 a los menos al 35% del gasto total nacional.
"Si nos comparamos con los países de la OCDE, tienen un 45% promedio del gasto total nacional que logra llegar a los municipios y los gobiernos regionales, Chile tiene solo el 18% del gasto total nacional que logra llegar a los municipios y gobiernos regionales y la comisión propuso que llegue al 35% de aquí a 4 años más", comentó.
Según estima Von Baer la ley de financiamiento local y regional, con responsabilidad fiscal se ha postergado varias veces, pero "no debe ser usado como excusa para no dar el primer y principal paso que es la elección de autoridades porque una vez que tengamos autoridades regionales electas, legitimadas y con estabilidad y con capacidad de liderazgo y de negociación, tarde o temprano el gobierno central de turno va a tener que enviar la ley de financiamiento".
No será un estado federal
Al consultarle al presidente de la fundación Chile Descentralizado sobre si lo que se busca con este proceso es replicar el modelo federal de Argentina, Von Baer fue claro en decir que no tiene que ver con replicar modelos federales puesto que Chile tiene una realidad de población y recursos que no lo permitiría. "Un estado federal genera muchos gastos y burocracia innecesaria, la idea es que sea algo intermedio por que el actual sistema chileno ya está obsoleto".