Obispo de Calama critica despidos en municipio y corporaciones
APOYO. Monseñor Óscar Blanco entregó su apoyo a quienes se quedaron sin trabajo.
Luego de conocida la decisión de la actual administración municipal de desvincular a más de un centenar de funcionarios municipales a contrata y honorarios, además de trabajadores de la Corporación de Cultura y Turismo y de la Corporación Municipal de Desarrollo Social (Comdes), el obispo de Calama, Óscar Blanco Martínez, en una declaración pública, rechazó el actuar del municipio y brindó su apoyo a quienes quedaron sin sus fuentes laborales.
En este sentido, el obispo comentó que se dirigía a las autoridades del gobierno comunal, "en particular en estas horas en que más de un centenar de trabajadores municipales o dependientes de esta repartición pública han sido desvinculados de sus trabajos".
Continúo argumentando que "las cifras revelan que es en esta parte del territorio donde se registra el mayor número de desempleados. Nos preocupa y nos duele cómo muchos no cuentan con una fuente laboral que permita llevar el bienestar básico a sus familias, pero sin duda nos preocupa más cuando esas cifras continúan incrementándose sobre todo en personas mayores que difícilmente podrán encontrar un trabajo prontamente".
Expresa también que, "el municipio de una comuna es por definición un organismo público que debe velar por el mejor bienestar de sus habitantes y este debe ser el horizonte que guíe a quienes por elección ciudadana son elegidos para esta tarea".
También hizo un llamado a hacer esfuerzos para que "con sabiduría se pueda mejor administrar el consistorio local, sin tener que recurrir al despido de trabajadores para hacer frente a un posible déficit presupuestario. Todos sabemos que la economía del país no pasa por su mejor momento, pero pongamos la confianza en nuestra gente, que con su entrega, voluntad y sacrificio pondrán nuevamente en la senda del crecimiento a nuestra querida tierra".
Monseñor también envió un mensaje a los trabajadores despedidos y sus familias y les dijo que "el compromiso como Pastores de esta Iglesia de Calama en continuar acompañándoles con oraciones y cariño".
También señaló que alienta a toda la comunidad , "para que aportemos desde nuestro ámbito a generar puestos de trabajo y facilitar la integración sin menosprecio de condición alguna, sino anteponiendo la dignidad de toda persona humana. Con mi afecto de Pastor".
Así, la Iglesia Católica se hizo parte de un problema social que fue generado por las desvinculaciones realizadas en las últimas semanas, de personas que por años se desempeñaron en diferentes labores dentro del municipio, como así también en aquellas tareas que deben llevarse a cabo en terreno, para mantener el funcionamiento de diversos servicios en la comuna.