Plaza I
Los resultados son los que dan razón y los hechos hablan más que las palabras. Estoy muy contento por lo espectacular que ha quedado nuestra Plaza 23 de Marzo, es una verdadera joya, con ribetes de modernidad. El piso tiene un bello mármol de la zona y a la vista se amplió con la limpieza de elementos que obstruían el paso, manteniéndose los añosos e históricos árboles. Pienso que ha sido todo un acierto y por eso que creo corresponde agradecer al ex alcalde Esteban Velásquez por su mirada de futuro y así como ayer le destaqué la construcción del Estadio de Fútbol, otro tesoro en Calama, hoy la plaza que sin dudas se transformará en un lugar para la tradicional postal. Espero que los ciudadanos estén a la altura de una construcción muy bien diseñada y la cuiden mucho, así el centro de la ciudad comienza a tener un mejor rostro.
Roberto Farías Arriagada
Plaza II
Pude disfrutar de la Nueva Plaza con mis hijos y sencillamente lindísima, un lugar de mucha calidad que debemos cuidar. Para que esté en buenas condiciones solo depende de todos los calameños.
Sonia Palacios Leiva
Habló Trump
Su primer discurso confirmó y amplió su programa inicial, y sin analizar su contenido, me refiero sólo a la superficialidad del espectáculo: sus dos personajes oficiales a su espalda obviamente regían el ritmo de las reacciones del público presente al levantarse y aplaudir ciertos comunicados, y esta estrategia la imitaban sus partidarios de la platea y resto del público, potenciando el contenido de lo escuchado.
Igualmente, Trump rindió acertados homenajes a destacados americanos fallecidos, identificando y señalando a las viudas presentes, cuyas reacciones humanas dramatizaban el mensaje. Este efectivo y elemental recurso le dio a su presentación inicial un sentido especial no empleado en discursos anteriores de presidentes pasados. Me parece que el Presidente Trump y su política nacionalista, logrará un inesperado éxito - a pesar de su discutida y particular personalidad - de lo cual el resto de los pueblos americanos también deberíamos.
David Benavente
Despacito
Despacito, poco a poco el Gobierno a través de su vocera, ha ido reconociendo que pudieron existir errores en la manera de cómo se enfrentaron e informaron los mega incendios, palabras más, palabras menos, lo que importa es que se aprenda de las experiencias, ubicar a los expertos en donde corresponda y desde ahora ser más proactivos que reactivos, todo lo demás simplemente es inconducente.
Luis Enrique Soler Milla
Ciberataques
Conocidos por la sigla DDoS (Distributed Denial of Service), los ataques Distribuidos de Denegación de Servicio son acciones malintencionadas- ejecutadas al mismo tiempo desde muchos computadores repartidos por el mundo- que buscan afectar el funcionamiento de un servidor o red de una organización.
Para ello, los hackers se valen de un Bot o programa informático que- instalado en cada uno de esos PC- imita el comportamiento humano, enviando una solicitud al sitio web que se ha definido como blanco del ataque. Como son cientos o miles los requerimientos que la página víctima recibe e intenta responder, el resultado es el colapso de ella.
Este tipo de práctica ha crecido en número e intensidad en los últimos años - gracias a los millones de computadores y dispositivos móviles que hoy existen y al avance de la Internet de las Cosas- transformándose en una verdadera arma que emplean los ciberdelincuentes para afectar la imagen de una empresa o institución y generar daños económicos y de imagen.
De acuerdo a cifras de A10 Networks, las compañías sufren en promedio 15 ataques de este tipo al año, lo que se traduce en una media de 17 horas de inactividad, siendo los DDoS cada vez más complicados de combatir. Por ejemplo, en los recientes Juegos Olímpicos de Río de Janeiro se detectó un ataque DDoS que sumó nada menos que 540 Gbps en solicitudes de servicio malintencionadas.
Frente a este alarmante escenario, se hace necesario que las organizaciones tomen las medidas adecuadas que permitan detectar a tiempo posibles vulnerabilidades de esta clase y proteger así su reputación corporativa junto con uno de sus activos más importantes: la información.
Cristián Cáceres, gerente de Consultoría, Diseño y Marketing de Acanto | Teknos