Rotonda de juguete
lHace bastante tiempo que deseaba hacer notar mi molestia, con respecto al ingreso sur de Calama.
Soy vecino del sector El Peuco, por lo que comprenderán, soy un usuario habitual del sector, como conductor.
Cuando se entregaron las obras del ingreso sur, no recuerdo la fecha exacta, no comprendíamos por qué los caminos en nuestra ciudad se construyen tan angosto, a pesar de la gran cantidad de terreno existente. Por ejemplo, camiones grandes al virar hacia Av. O'Higgins, se deben subir a la vereda, porque es muy pequeño el acceso y esto lleva al deterioro de las obras. Eso es lo primero.
En segundo lugar, cuando se inauguró la iluminación del sector, excelente, todo bien. Pero lo bueno duró poco, la iluminación falló y así está por mucho tiempo. Es una verdadera boca de lobos para quienes transitan como peatón y para los automovilistas por la falta de iluminación y la destrucción de algunas señales de tránsito. Además, esta oscuridad se ha prolongado hacia la nueva Av. Balmaceda.
Quiero hacer un llamado a la autoridad que corresponda, para dar una pronta solución a este problema, que lleva mucho tiempo en esas condiciones. La falta de iluminación aumenta la inseguridad de los vecinos.
S.I.N.
Despido
Hoy una empresa que hace trabajos en la minería se ha permitido el lujo de despedir a un trabajador sin tener motivo ninguno. Esa empresa que presume de altas calificaciones en seguridad laboral y más de 200.000 horas sin accidentes laborales, cada vez que se sube a una planta minera les ocurre algo.
No obstante, luego anda permitiendo que se transporten personas sin la correspondiente licencia de conducir, eso sin contar que el vehículo carece de póliza de seguro.
No es justo que se permitan despedir a alguien exponiendo " necesidades de la empresa" cuando esa persona no hizo más que aportar, colaborar, ayudar, cumplir con su trabajo, aunque tenía un gran fallo,....que decía la verdad. Parece que algunas empresas no les gustan las personas que sólo dicen la verdad. Dejémoslo en manos de la justicia, a ver si hay justicia.
J.M.
Sociedad
"Como sociedad" tendemos a utilizar demasiado la expresión "como sociedad" para culparnos. Seríamos culpables de no dar a los jóvenes las oportunidades que necesitan empujándolos al camino del delito. Puede ser cierto en algunos casos pero en la gran mayoría creo que la sociedad sí da oportunidades… para delinquir. El ser humano selecciona las mejores oportunidades que tiene, y siempre desechará aquella del esfuerzo grande con rédito pequeño. Verá como su vecino prospera y , si bien lo detienen de vez en cuando, siempre queda en libertad rápidamente. La señal es que ese camino no será tan equivocado si su castigo en la práctica no existe.
En el fraude de Carabineros, alrededor de 100 personas, a las que la sociedad les dio todas las oportunidades imaginables, se convirtieron en delincuentes. Lástima que la sociedad también les dio una gran oportunidad de delinquir: un sistema que demostró su eficacia por muchos años produciendo millonarios a corto plazo y sin mayor riesgo. En este caso, "como sociedad" hicimos nuestro aporte a través de controles laxos o inexistentes.
Las teorías modernas del delito no logran opacar a la sabiduría popular : "La ocasión hace al ladrón".
José Luis Hernández
Censo
El último censo ha revelado que la población regional alcanza las 607.544 personas, que habitan 196.349 viviendas. De aquello se deduce que habría un promedio de 3,09 personas por vivienda, variable que no refleja un déficit precisamente, sino demuestra que con estas primeras cifras censales es imposible calcularlo.
En términos simplistas, el déficit habitacional es la diferencia entre el número de viviendas aptas existentes en una determinada unidad territorial y el N° de familias que allí viven. Por tanto, habrá que esperar la cuantificación de viviendas inaptas para estimar objetivamente la cantidad de familias que viven bajo techos precarios.
Por otra parte, déficit y demanda son cosas distintas. Hay familias que viven en casas deficitarias y siendo propietarias de ellas, no son demanda. La demanda es integrada por quienes arriendan, están allegados, moran en campamentos, etc., y parte importante de ella requiere algún tipo de apoyo para adquirir una vivienda.
Entonces, desde la perspectiva política, es recomendable que los responsables cuantifiquen la demanda que carece de medios y requiere subsidios para acceder a la casa propia, y al momento de diseñar planes y programas, considerar la situación de las familias propietarias de viviendas inaptas, que no tienen capacidad económica para mejorarlas.
Juan Enrique Pimentel