Accesibilidad hacia el oriente de Calama
La inversión vial desde Balmaceda hacia Topáter y el aeropuerto permitirá acortar el tiempo y distancia hacia ambos sectores. El desarrollo que pueda experimentar la ciudad hacia el oriente debe ser siempre pensando en proteger y preservar el oasis y el río que está en ese lugar.
El crecimiento de la ciudad será necesariamente hacia el oriente y para ello se requieren dos iniciativas: abrir nuevos accesos y al mismo tiempo proteger el oasis que genera el río Loa.
Los primero, se encuentra dentro del proyecto que tendrá recursos compartidos del Minvu y el Core y que suman más de seis mil millones de pesos para permitir una mejor conectividad hacia el oriente, a los sectores Topáter, Peuco y el aeropuerto.
El proyecto se extenderá por algunos años y contempla consultoría, obras civiles y compra de terrenos.
Por eso, insistimos que es clave que este proyecto vele por el oasis que se desplaza por este lugar y sea protegido como prioridad.
Indiscutiblemente esta iniciativa es una proyección al futuro de la ciudad que deberá expandirse hacia el oriente, considerando que el sector poniente ha llegado hasta la orilla de pertenencias mineras.
Otra propuesta que siempre se ha hecho es extender la ciudad hacia el sur, pero será a largo plazo, porque requerirá de dotarla de servicios básicos.
En la actualidad el seccional Topáter se abre como una gran opción para crecer con nuevos proyectos urbanos e inmobiliarios, una vez sorteados algunos litigios patrimoniales de algunos sectores.
Para desarrollar todo este crecimiento hacia esa zona, es primordial tener un buena conectividad con el centro de la ciudad, que hoy es restringido con una arterias que es avenida La Paz, pero sinuosa y sin bermas.
El proyecto se desarrollará en los próximos cuatros años y debiera permitir un acceso a la ribera del río Loa, que coincida con el proyecto de extender el borde río hacia el nororiente.
Es una gran opción para dar un nuevo rostro hacia la ciudad integrando el oasis, pero sin dañarlo, y lograr un aspecto más amigable de la ciudad, considerando que tenemos un río que resaltar y proteger.
Este será un gran paso para seguir urbanizando armónicamente la ciudad.