Efe
El precio del petróleo rebotó al alza ayer, sobre todo el crudo de Texas, justo cuando el presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenó a su Armada la destrucción de naves iraníes si se sentía amenazada en el Golfo Pérsico, lo que los analistas han interpretado como una jugada geopolítica en una zona clave para el abastecimiento de crudo.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) se recuperó un 19,1% tras el desplome de las jornadas anteriores y cerró en 13,78 dólares el barril, mientras que el Brent para entrega en junio ascendió hasta los 20,39 dólares, 6,92% más.
Los precios del oro negro en Estados Unidos llegaron a dispararse durante la jornada de ayer en hasta 40%, y si bien después se moderó, pudo recuperar una parte de las pérdidas que venía acumulando.
En lo que va de año, los precios del WTI se han desplomado cerca del 70% y se sitúan muy lejos de los 60 dólares el barril de enero.
Las últimas sesiones han sido especialmente volátiles y han dado pie a situaciones sin precedentes, como la cotización en negativo de los últimos barriles del contrato de mayo, lo que obligaba a los productores a pagar a los compradores por llevarse el crudo de sus instalaciones.
Según los analistas, el mercado se enfrenta a un grave problema de saturación, con la capacidad de almacenamiento escaseando ante el desplome de la demanda motivado por el frenazo económico en buena parte del mundo para combatir el coronavirus.
En Estados Unidos, la situación del almacenamiento es especialmente grave y se espera que las instalaciones en el principal punto de entrega del país, en Cushing (Oklahoma), se llenen en cuestión de semanas. Según el Gobierno, las reservas de petróleo estadounidenses aumentaron en 15 millones de barriles al 17 de abril.
Licencia para disparar
No obstante, hay analistas que achacan el rebote de ayer sobre todo a la presión de Trump en una zona sensible para el suministro mundial de petróleo, el Golfo Pérsico.
El presidente de Estados Unidos anunció que ha ordenado a la Armada de su país "derribar y destruir" buques iraníes si llegan a hostigar embarcaciones estadounidenses en el Golfo Pérsico.
"He ordenado a la Armada de EE.UU. que derribe y destruya todos y cada uno de los cañoneros iraníes si llegan a hostigar nuestros barcos en el mar", tuiteó el mandatario.
Las declaraciones de Trump se producen después de que hace una semana el Pentágono denunciara que once embarcaciones de la Guardia Revolucionaria iraní -designado como grupo terrorista por Washington- se aproximaron a buques de guerra estadounidenses en el Golfo Pérsico y calificó los movimientos de "peligrosos".
Además, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, criticó al lanzamiento con éxito del primer satélite militar de la República Islámica. "Creo que Irán debe rendir cuentas por lo que ha hecho", dijo el titular de Exteriores, que consideró que Teherán ha violado una resolución de Naciones Unidas que prohíbe el lanzamiento de misiles militares.
Irán tiene 85.996 contagios de covid-19 y 5.391 muertes.