Chuquicamata de aniversario
Así pasaron los años donde las chimeneas botaban sus llamaradas y humo día y noche.
En estos días que celebramos 105 años , desde que en Tocopilla el 18 de mayo 1915; empresarios americanos, autoridades y trabajadores esperaron que el presidente de Chile don Ramón Barros Luco pusiera en movimiento las maquinarias del mineral , apretando un botón desde la Moneda dando por inaugurado Chuquicamata.
Aquí nacimos, vivimos, trabajamos cinco generaciones; formando grandes familias, con los que desde la zona central, del valle de Elqui, vecinos de Calama y alrededores llegaron a trabajar. Se trajo el agua, la luz, se construyeron campamentos: el Americano para jefes y el nuevo juegos infantiles formándose varios clubes con canchas de fútbol, tenis, golf, Club Chuqui para aportes, gimnasia y peleas semanales y cines Variedades y el Chile.
Así pasaron los años donde las chimeneas botaban sus llamaradas y humo día y noche .Los pitazos se escuchaban anunciando los horarios de entrada, salidas de los trenes llevando los mineros a las faenas. Los polvorazos de las una de la tarde removía el corazón de la mina .La Gran Pala llevaba su carga al molino, a la concentradora, a la fundición .Los trenes botaban el ripio a la inmensa torta que creció y en las noches brillaba la escoria roja caliente.
En los primeros años los niños aprendíamos en la escuela el silabario de la vida, las niñas modas y ser dueñas de casa, mientras en las noches los adultos iban a clases de maquinarias. Entonces la Iglesia Católica fundó la Escuela Industrial San José para preparar a los jóvenes en carpintería, mecánica y electricidad y poder trabajar en la empresa. Después de años fue reconocida por el Estado; educando a muchos jóvenes que aún trabajan en Chuquicamata.
Siendo alumno Ricardo Monterrey recuerda que el Inspector Don Guillermo Arias, le pidió que reuniera a otros estudiantes que tocaban: tambores, bombos y platillos en Ayquina para formar una banda. Más tarde se agregaron jóvenes de la Defensa Civil con pitos y cornetas. Algunos instructores voluntarios como el músico y guaripola de los boy scouts de Chuqui , don Aníbal Monterrey y otros practicaron por meses; presentándose los alumnos guiados por portaestandartes y guaripola: Carmona, Villanueva y Huanchicay dando inicios al desfile de la gran banda y alumnos de la Escuela San José que orgullosa hasta hoy mantiene la memoria.
Nancy Monterrey,
Escritora chuquicamatina