Disciplina social
Para las autoridades en ejercicio: la disciplina social no es sinónimo de represión. Si los ciudadanos no obedecen las medidas de control y cuidado, deben actuar con mayor energía y decisión; quienes interpreten esto como represión, están viviendo en un mundo en blanco y negro, cuando en la realidad está lleno de colores y cuando hablo de colores, no me refiero a los colores que representan a tal o cual partido político, que en estricta verdad, han tenido cero aporte en las actuales circunstancias.
H. S.
Esperanza
Frente a la advertencia de algunos alcaldes sobre un posible aumento de las protestas, no se puede pretender deslindar en el Estado toda la responsabilidad en el control de la pandemia; la contribución de los ciudadanos es lo más decisivo, y es allí donde la sociedad civil debe jugar su papel.
En octubre pasado, era el "estallido"; hoy, es el virus. El coronavirus, y la paralización económica que conlleva, llegó con fuerza a mostrarnos que el bienestar social y económico no es un dato de la naturaleza: se construye día a día con el trabajo y la creatividad de todos. No se pueden lograr mejores condiciones para la población simplemente pasando recursos de un bolsillo a otro, el dinamismo de la actividad es el camino para lograr bienestar social y es muy difícil lograr congeniar ambas situaciones cuando además se vive con coronavirus.
Sé que es difícil para algunas familias, pero lo mejor es no generar más dificultades. En algunas semanas las personas que en verdad necesitan ayuda del Estado recibirán beneficios como una canasta de alimentos, un ingreso familiar por la emergencia o apoyo de los municipios. y en algunas semanas mas o meses, podrán trabajar para recuperar juntos este país.
La situación se ve difícil, pero lo es aún más cuando agregamos protestas y destrucción.
Valentina Ramírez
Desafío
Enfrentamos una situación especialmente grave: aumentan los contagios y los fallecidos, muchas empresas han quebrado o están al borde de hacerlo, se han destruido miles de empleos, sectores medios caen en la pobreza y aumenta la indigencia. El hambre ronda en los hogares más desvalidos. Los sectores vulnerables no están en condiciones de acatar las medidas sanitarias generándose un verdadero círculo vicioso porque las cuarentenas no pueden ser respetadas.
En esa línea, se agradece despacho de la ley, sin embargo, no debemos olvidar que la oposición realizó todo lo posible para que esa transferencia monetaria no se realizara en un momento oportuno. Ayer cientos de familias casi queda sin un ingreso extra por jugarretas políticas.
Estamos en una pandemia. Concentremos nuestros esfuerzos en trabajar unidos, tal como lo fue el Bono Covid, el congelamiento de alzas de transporte y energía post estallido.
La historia lo muestra, del trabajo juntos obtenemos buenos resultados, ojalá ese espíritu se mantenga por los más vulnerables y todos los chilenos.
Francisca Herrera J.
Franjas
Dejemos por un momento nuestras preferencias en la disyuntiva del Plebiscito (Apruebo-Rechazo) y pongámonos en los zapatos de los publicistas de las franjas electorales : ¿Qué ofrecerá el Rechazo? Reformas a la Constitución, que deberán hacerse con los mismos bien pagados parlamentarios algunos de los cuales, los más capaces, supuestamente, tendrán que trabajar un poquito más, y todos tendrán que dejar de lado sus obligaciones legislativas habituales en las que siempre están al debe en cantidad y calidad. Los publicistas tendrán que vender alguna idea de por qué no hicieron las reformas antes, además de cómo lo harán para no seguir cajoneando tantos proyectos necesarios y urgentes. ¿Qué ofrecerá el Apruebo? Incertidumbre política por un par de años, desapareciendo la escasa y sufrida inversión que todavía quede y, por lo tanto, aumentando aún más el desempleo en medio de una recesión larga y brutal, salvo para 155 afortunados constituyentes que sí conseguirán trabajo ganando unos 2 millones de pesos mensuales, sea que su Constitución resulte aprobada o rechazada. ¿Cómo le explicarán a la gente los publicistas que ese negro panorama es mejor para todos y no sólo para los 155 ? ¿ Cómo convencer a millones de personas que no dejen de ir el 25 de octubre a introducir su voto en la urna sin saber si tendrán algo que echar a la olla ese día? ¿Cómo callar, sin engañarlas, que esas personas ayudarán a algunos políticos en su lucha por el poder pero empeorarán aún más su situación personal ? ¡Vaya desafíos publicitarios!
José Luis Hernández Vidal