Concesionaria sostiene que faena minera generó hundimiento en autopista a Calama
INFORME. Indica que el sector afectado llega casi a 1,5 kilómetros.
Desde agosto de este año los transportistas y automovilistas que viajan hacia Calama deben sortear un desvío de aproximadamente un kilómetro y medio, frente al sector donde tiene operaciones la minera Mantos Copper.
El desvío obliga a la reducción de velocidad y al retraso ante los recurrentes tacos que se suelen presentar producto del alto tráfico de camiones y vehículos en el sector.
Pero el desvío que se originó por pequeñas grietas en el pavimento parece ser, literalmente, más profundo de lo que aparenta.
A fin de dilucidar las razones que explican las "deformaciones visibles" del pavimento, así como las "deformaciones a la fecha no visibles", comprendidas entre el kilómetro 1.406,300 al 1.407,125, la concesionaria de la ruta, "Autopistas de Antofagasta" encargó un informe geotécnico y de diagnóstico la empresa ASISTECSA, una consultora de ingeniería especializada en obras civiles.
Las conclusiones del "Estudio de mecánica de suelo en torno al km 1.407" sostiene que las deformaciones producidas en el pavimento asfáltico se deben "al aumento del nivel freático en esa zona, que generó pérdida de la capacidad de soporte del suelo de subrasante al disolver sales presentes, provocando las deformaciones y agrietamientos en la superficie".
El informe señala que la dirección natural de escurrimiento del acuífero es en dirección NE a SW hasta llegar a la zona de descarga del Salar del Carmen. Sin embargo, los perfiles obtenidos frente a la minera determinó que la dirección del flujo en esa zona es de N a S y/o de NW a SE.
"Se puede inferir que el aumento del nivel freático no es un fenómeno natural, dada la baja pluviometría de la zona. El aumento del nivel freático y, por ende, la recarga del acuífero en esa zona corresponde a un origen antrópico, coincidiendo que en la zona la única actividad antrópica existente corresponde a la Minera Manto Copper", concluye el informe.
Para la consejera regional Sandra Pastenes, presidenta de la comisión de Obras Públicas, la situación reviste especial cuidado ante el riesgo de accidentes, por cuanto el problema afectaría a las cuatro pistas de la ruta.
"El análisis físico químico de las aguas contienen componentes propios de la lixiviación. Entiendo entonces que la minera deberá hacerse cargo, cuestión que determinará, en cuanto a medidas, Concesiones del MOP. No obstante también se requiere el pronunciamiento de medioambiente. La situación es compleja porque se estarían afectando aguas subterráneas y por otra parte se deberá buscar la solución técnica para relocalizar todas las vías de la tan esperada conexión de doble pista Antofagasta- Calama", indicó.
Desde la Dirección General de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (MOP) indicaron que tras el informe geotécnico entregado por la concesionaria vial, espera definir las alternativas de diseño de ingeniería más eficientes, que van desde el reemplazo de las capas de suelo subyacente hasta la incorporación de micropilotes y geogrillas como refuerzo a la estructura.