Fiestas de Fin de Año y Reyes
"Hoy recordamos la llegada de los Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltazar que guiados por la Estrella de Belén".
Hemos llegado a fin de año y empezamos a llamar a los parientes por Whatsapp; para desearle un mejor año 2021. Saludando a Tom de Australia, escuchamos sonar las campanas de las 12 de la noche, anunciando el Nuevo Año. Aquí eran las 10 mañana. La tecnología nos regaló un momento mágico al poder hablar y ver a seres queridos que están lejos y a distintas horas. Siguiendo las preparaciones de fin de Año hice los rituales de buena suerte para 2021.
Use las pantaletas amarillas, guarde dinero en mis carteras, me comí 12 uvas pidiendo deseos, y vi quemar un mono representando el año viejo con un Chile con menos trabajos, pocos ahorros que al inicio de la pandemia en marzo. Cada día llegan más inmigrantes por Ollagüe.
Algunos han caminado por tres días, vienen desde Venezuela, traen niños y necesitan ayuda. Santiago y Antofagasta somos los lugares donde llegan más personas buscando un futuro mejor.
Hoy recordamos la llegada de los Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltazar que guiados por la Estrella de Belén llegaron desde el Oriente a saludar al niño Jesús recién nacido y entregarle regalos de Oro, Incienso y Mirra.
Hoy en Argentina y España se repite esa noche maravillosa del 6 de enero; y se entregan los regalos a los niños que se portaron bien. Nosotros celebramos el nacimiento del niño Jesús, escuchamos la Misa del Gallo de Medianoche, y recibimos los regalos el 25 de diciembre.
Siendo niños íbamos hasta el 6 de enero; cada atardecer a los nacimientos y con inocencia y fe adorábamos al niñito Jesús de los dos miles, Hundidos en Chuqui y en Calama el de la Banda y otros. Los sonidos de los tambores y acordeón que traía el viento nos llevaban donde había un Nacimientos. En una fila cruzando pañuelos hacíamos los pasos y reverencias siguiendo las melodías del guachi guachi Torito. Los dueños de casa hacían nacimientos decorándolos con caídas de agua, pasto verde, animalitos, pastorcitos. Nos servían bebidas y pastillas, chocolate caliente y el ultimo día los bailes promesantes recorrían los nacimientos. Les preparaban patasca o picante de cordero.
Hoy día la pandemia silenció en Calama los nacimientos, uniéndose al silencio de Chuquicamata que está dormido, esperando despertarse con el resultado de las reuniones mensuales de las Mesas Técnicas y Sociales de los chuquicamatinos con Codelco.
Nancy Monterrey
Escritora