Redacción
Pasadas las 14 horas de ayer, Pablo Terrazas, vicepresidente de Corfo salió a responder parte de los cuestionamientos surgidos la tarde del lunes, después que la Corporación anunciara la adjudicación del Instituto de Tecnologías Limpias.
Era un escenario impensado y solo explicado por las críticas de sectores políticos y autoridades académicas -estas últimas pertenecientes al consorcio ASDIT, uno de los derrotados- después de confirmado el triunfo del consorcio de universidades norteamericanas Associated Universities, Inc., AUI.
El asunto se complicó luego de que actores pidieran que el proceso fuera revaluado, algo que Terrazas descartó. Sin embargo, anoche trascendió que esta mañana habrá una reunión de acercamiento entre las partes. La idea es que el gobierno sea garante de la inclusión de la opción de ASDIT (una de las perdedoras y que incluye a las universidades nacionales) sea incluida en la AUI.
Algunos detalles
La máxima autoridad de Corfo apuntó que el proceso de adjudicación fue transparente e internacional, por lo que las tres opciones en competencia eran contundentes. No entró en detalles de por qué la opción de AUI fue la ganadora, pues esto se conocerá una vez que los firmantes del Consejo entreguen los detalles (acta de adjudicación), lo que ocurrirá posiblemente esta semana.
Terrazas sí fue enfático en que el centro será "sin fines de lucro, chileno y domiciliado en la Región de Antofagasta".
"Lo que tiene que hacer este instituto, en conjunto con la Corfo, es abordar los desafíos en tres áreas: en materia de energía solar, los derivados del hidrógeno verde, convertir a Chile en un país minero sustentable, donde avancemos hacia el cobre verde y darle mayor valor agregado a la producción de litio. Eso es lo que hará la Corfo con este instituto chileno domiciliado en la Región de Antofagasta".
Al tiempo negó que el beneficio intelectual o de conocimiento que produzca el centro, vaya en beneficio de universidades extranjeras. Como es sabido, la AUI está conformada en lo fundamental por las universidades de Harvard, MIT, Columbia, Princeton, Cornell, Pensilvania, Princeton, John Hopkins, Rochester y Yale, todas estadounidenses, lo que generó suspicacias entre los planteles locales (ver recuadro).
"Lo que estamos haciendo es licitar para alguien que nos asesore en la creación de un instituto chileno. La plata no va a ninguna universidad de ningún país del mundo. La plata queda en un instituto chileno que tiene domicilio en la Región de Antofagasta, cuyo edificio físico va a estar en la ciudad o en la región de Antofagasta. Por lo demás, el directorio estará integrado por chilenos, de los cuales dos van a ser autoridades del gobierno. Y a eso se suma que el plan de gestión de recursos se adoptará año a año, entonces es la Corfo es la que irá revisando esto", detalló.
Terrazas ahondó en la idea y citó que la idea es que la zona sea una especie de laboratorio donde se estudien distintos desarrollos, para lo cual la opción de AUI, como plataforma abierta, ofrecerá garantías para los planteles y empresas locales.
El centro recibirá en los próximos 10 años una inversión estimada de US$ 265 millones, en donde el aporte por contratos de SQM será del 54%, mientras que el de AUI será de 46%. A partir de entonces, la idea es que el centro sea autosustentable.
Defensa del proceso
Terrazas abordó la citación que tuvo el lunes en la Comisión del Futuro del Senado. En esa instancia se abordaron dos consultas: el rol de los evaluadores internacionales en el proceso y por qué no votaron en la adjudicación varios ministros titulares (lo hicieron los subsecretarios), lo que la autoridad explicó por razones de inhabilidad por relación con alguna de las instituciones participantes.
Entre estos se contaba el mismo Terrazas y secretarios como Ignacio Briones, ministro de Hacienda, Lucas Palacios, de Economía; Andrés Couvé, de Ciencias. Por todo lo anterior, el vicepresidente ejecutivo desestimó vicios y menos realizar un nuevo proceso.
"Esto es en beneficio del país, porque queríamos que llegara la mejor propuesta", destacó.
El consorcio AUI descartó comentar lo acontecido con el proceso. El lunes había dejado en claro que se invitaría a los planteles y gremios locales.
Fuentes allegadas, citaron que estas reuniones se llevarían a efecto a la brevedad, sin entrar en mayores detalles.
Pablo, Terrazas, vice presidente Corfo
"Los recursos no se traspasarán a ninguna universidad norteamericana, sino a este centro que es chileno".
Jorge Tabilo, Rector UCN
"Desde un principio impulsamos la propuesta de ASDIT, porque creemos que asegura un fuerte impulso a la investigación".
La voz de las universidades locales
Jorge Tabilo Álvarez, rector de la Universidad Católica del Norte y Luis Alberto Loyola, rector de la Universidad de Antofagasta (ambas instituciones pertenecientes al consorcio ASDIT citaron, en una declaración conjunta, que la adjudicación a un consorcio extranjero fue una "gran decepción". "Los rectores de la UA y la UCN creemos que la adjudicación del proyecto a un consorcio extranjero deja en un segundo plano a las universidades chilenas -las instituciones generadoras de la mayor parte de la investigación y el conocimiento en Chile- en la carrera tecnológica por desarrollar áreas claves para el futuro. En mayor detalle, Tabilo dijo que compartía "su sorpresa" por la decisión de Corfo, "pues deja pasar una gran oportunidad para consolidar un desarrollo sostenible y enfocado en los territorios". "El costo de esto podría ser muy alto, ya que no se contaría con la mayor inversión en I+D que se espera en Latinoamérica para una iniciativa en esta materia, con el consiguiente daño al desarrollo de la ciencia en Chile. Desde un principio impulsamos la propuesta de ASDIT, porque creemos que asegura un fuerte impulso a la investigación nacional en energía solar, minería sustentable y materiales avanzados de litio y otros minerales, y el hidrógeno verde". El doctor Álvaro Restuccia Núñez, vicerrector de Investigación, Innovación y Postgrado de la UA añadió que "creemos que con el resultado de esta licitación se está empeñando la riqueza más grande, que es la generación de conocimiento para nuestra región, desconociendo el trabajo conjunto y la capacidad instalada de las universidades regionales y nacionales".