Covid y cifras de contagiados
La Región de Antofagasta tiene hoy en la cantidad de casos activos y ocupación de camas, dos de sus indicadores más delicados. Cuidemos las vidas. Tenemos certeza de que al menos el 5% de la población regional ya enfermó en algún momento con el virus, pero la cifra podría ser el doble o hasta de 150 mil personas. Lo mismo podría ser a nivel mundial.
Las cifras del covid en el mundo, en el país y en la Región de Antofagasta son impresionantes y claramente han superado las impresiones preliminares de expertos y autoridades, todo en apenas un año de pandemia.
Cien millones de enfermos en el planeta, 30 mil en la región, es decir , un 5% de la población afectada en algún momento, dan cuenta de la magnitud y alto contagio del coronavirus; más aún distintos expertos suponen y estiman que esas cifras deberían ser a lo menos el doble y en el peor de los casos hasta cinco veces más. Si esto fuera correcto, los márgenes correctos de infectados debieran estar en el orden de los 200 millones o 500 millones en el caso más extremo a lo largo del planeta y de 60 mil o 150 mil, en el caso de la región de Antofagasta.
Esto es porque muchas personas se contagiaron y no presentaron síntomas ante la enfermedad, de modo que nunca sufrieron los rigores de este mal, algo que estaba presupuestado: la gran mayoría de los enfermos no presenta dificultades importantes, pero una minoría padece extremas complicaciones.
De paso, las cifras revelan que el covid-19 contagió proporcionalmente a mucha más gente en nuestra región. Aquello podría tener dos causas distintas: la mayor trazabilidad y testeo realizado en la zona, o bien que el impacto fue definitivamente mayor por causas que hay que averiguar, considerando los promedios son muy superiores a lo que presenta el resto del planeta.
Lo mismo ocurre para el caso de la letalidad un margen que la provincia El Loa y Calama en particular, presentaron cifras por sobre el promedio y definitivamente uno de los más altos del mundo, con todo lo dramático que eso significa. Esto abre una tarea de revisión de lo obrado y un análisis fino en relación con lo que debe corregirse para enfrentar este tipo de situaciones que seguramente no serán las únicas que veremos en el futuro inmediato y en el largo plazo.
La pandemia de coronavirus no será la última de la historia, ese es un hecho y debemos prepararnos para ello, estando alertas y con el equipamiento más adecuado.