"El patio de mi casa era el desierto"
ANTOFAGASTINIDAD. Jorge González, actor de la Compañía de Teatro de la Universidad de Antofagasta.
De profesión diseñador gráfico y actor por oficio, Jorge González Troncoso (55), integra hace 31 años el elenco de la Compañía de Teatro de la Universidad de Antofagasta.
Nació en el pueblo de Mejillones, donde vivió hasta los 15 años. Se inició como actor en su época universitaria tras al ingresar al taller que dirigía la destaca actriz antofagastina Teresa Ramos y el actual director de la compañía de la UA, Raúl Rocco.
¿Qué proyectos teatrales estás desarrollando actualmente?
- Hoy la UA nuevamente retomó su trabajo después de las vacaciones. Nosotros el año pasado por la pandemia nos vimos obligados a trabajar desde nuestras casas. Entonces realizamos una obra que no se estrenó y que se va a estrenar este año, en el marco del Festival Fitza, que es una obra que se llama "Panzer", que fue escrita y dirigida por Raúl Rocco y actuada por todos los actores de la compañía, eso es lo que tenemos. También estoy trabajando en un proyecto que es de audio-historias para una agrupación de abuelitos con ceguera. Es un trabajo que empezamos a mediados de año y lo estamos terminando y entregando ahora. El otro proyecto cercano es el festival, yo formo parte de la Agrupación Artístico Cultural Pedro de la Barra y estamos ya ad portas de comenzar la versión 2021, que está programada para a fines de marzo y será por primera vez un festival online.
¿Cuál es el espacio de la región que más te gusta?
- Espacio físico, al aire libre. Primero creo que si estamos hablando de arte por lo general en el norte tenemos pocos espacios donde se desarrollan actividades artísticas, los centros culturales como el de Mejillones que es hermoso, el Centro Cultural de Taltal, Tocopilla, que he tenido la oportunidad de conocer. A mí me gustaría que estos espacios pudieran atraer más gente, cada vez que tenemos presentaciones o que va algo cultural, va poca gente, a veces estos lugares y espacios son pequeños grandes elefantes blancos que quedaron hechos ahí.
El espacio que más me gusta es el que vamos a tener, que es el espacio que sería el Teatro Pedro de la Barra, no quiero pecar ni decir Centro Cultural Pedro de la Barra. Un espacio donde no haya solo una sala de teatro, sino que también se pueda mostrar pintura, donde pueda hacerse ballet, donde se le dé un movimiento constante y no quede solamente como una función de fin de semana. Soy de una generación antigua donde en Santiago el Teatro a Mil se hacía en el Parque Bustamante, me gustaría que hubiese ese tipo de espacio donde se puedan montar galerías y la gente toda, no importa si no tienen dinero, tuvieran la oportunidad de acudir. Que la gente se empodere de estos espacios públicos y hacer actividades culturales ahí.
¿Qué te mueve y apasiona en la vida?
- Me apasiona lo que hago, me mueve el amor por las cosas, no hago algo si no lo hago con amor y con ganas. Cuando yo tomé la decisión de dedicarme al teatro sabía que era una decisión de vida entonces. He pasado por momentos difíciles en la vida, como todo ser humano, de pérdidas fuertes, de dolores, frustraciones, decepciones, pero me sigue apasionando tanto el teatro que yo quisiera seguir siempre haciendo esto. A veces las ganas, las fuerzas, el ánimo, se baja un poco, pero soy un apasionado por esta profesión, que creo que es la más hermosa del mundo. Esto me permite cada día durante todo el año, ser una persona distinta, cambiar, mis emociones, traspasar un escenario, llegar a personas, llegar a los corazones de las personas con un personaje. Me apasiona poder vivir de esto, soy uno de los actores privilegiados en el país al estar bajo el alero de una universidad que te permite hacer esto que tú quieres de una forma holgada y libre. Me mueve el amor a Dios también, el amor hacia la gente que quiero y hacia la gente que hace lo mismo que yo, creo que somos afortunados y cuando uno toma una determinación que es de vida, creo que hay un ser supremo que te ayuda y que no eres tú solamente el que decide sino que él también decide lo que harás en la vida. Yo siempre supe, desde pequeño, que lo que yo quería hacer era dedicarme a ser actor.
¿Cuál es la principal enseñanza que te dejaron tus padres?
- La principal enseñanza es el tratar de hacer las cosas bien, tratar de ser honesto con lo que hago, yo provengo de una familia del ferrocarril, de un pueblo donde el patio de la casa era el desierto, es decir, un patio inmenso, en donde en Año Nuevo podías quemar monos y tener kilómetros de patio, cuando sé es niño a lo mejor no se valoran tanto esas cosas, yo tenía playas a doscientos metros de mi casa, terminaban mis clases en diciembre y me sacaba los zapatos y me los volvía a poner en marzo, porque me encantaba andar a pies pelados, iba a la playa, me quemaba como carbón... por qué nombro esto, porque eran cosas tan sencillas y de pueblo, como era volver en la tarde de la playa con los mocos colgando de frío y lo único que quería era colgarme a la bolsa del pan y tomar tesito. Cuando uno es grande se da cuenta por qué no valoré siendo niños todas esas cosas.
Yo creo que la principal enseñanza de mis padres fue la humildad. Mi padre fue una persona que trabajaba en el ferrocarril, pero además tenía un hobbie de ir pescar y se iba con un compañero los fines de semana y volvía los domingos con su bote lleno de pescados y mariscos, y todas esas cosas se las regalaba a la gente, entonces él era una persona muy noble, lo hacía por hobbie. Mi madre era una persona muy dedicada a su hogar, muy tranquila, muy introvertida, muy con su mundo para ella y para su familia, creo que la enseñanza entre los dos era ser noble, honesto y buena persona.