Ricardo Pinto Neira
Este domingo, Cobreloa enfrentará al único club chileno al que no ha vencido en cancha en toda su historia: Deportes Santa Cruz. Un partido que el defensor naranja, Jaime Soto espera con ansias.
"Esperamos retomar el camino de las victorias. Sabemos que ellos han jugado una sola vez acá, yo estaba en el club ya y se llevaron un triunfo. Tienen un bloque defensivo importante y sus dos delanteros son peligrosos y aprovechan los espacios. Pero siento que va a ser un partido como el que jugamos en casa como Puerto Montt, donde nos plantearon un 4-4-2 cerrado y en la medida que estemos claros y hagamos lo que siempre hacemos jugando de local, podamos dejar esos puntos en casa".
El "Tunga" reconoce que en Temuco se perdió porque al equipo le falta salir a hacer lo mismo que cuando se juega en el Zorros del Desierto. "Quizás son los rivales que reciben a un club grande y salen a jugarse mucho pero nosotros definitivamente bajamos mucho saliendo de Calama. No sólo tenemos menos tenencia sino que además, hacemos muchísimo juego lateral y no profundizamos. Nos falta trabajar esa puntada final que en casa lo hemos ido solucionando, pese a que los rivales se nos cierran atrás".
Eso sí, el valdiviano se defiende ante las críticas que recibió el equipo por parte de los hinchas en redes sociales, donde se habla de que a Cobreloa le falta ambición jugando fuera de su feudo.
"Si no tuviéramos ambición, nadie saldría a jugar. Este grupo tiene mucha hambre, es muy ambicioso. No es ese la palabra que usaría. Yo siento que nos falta convencimiento, que somos un poco temerosos de que nos pillen mal parados cuando jugamos como visitantes y eso se debe mejorar. Salir a jugar igual en todos los partidos. Pasa que muchas veces, la cancha como Copiapó, que era sintética o la de Temuco, que estaba imposible no te lo permite. Pero también tiene que ver con la confianza que tenemos que ir ganando, como lo hicimos para salir del mal momento siendo locales".
Arbitrajes
El defensor de Cobreloa lleva tres fechas acumulando cuatro tarjetas amarillas y está en riesgo de quedar suspendido.
¿El motivo? El jugador sostiene que "si ven las amarillas que tengo, son casi siempre por reclamar y no por faltas. Yo tengo mi forma de jugar y claro que tengo que controlarme o cuidarme pero generalmente, el tema pasa porque los árbitros me sacan de quicio. Yo no soy de hablar mucho de ellos pero en los partidos te condicionan porque te insultan, te lanzan alguna palabrota y eso te molesta de entrada. Uno no quiere que lo traten como alguien especial pero ese maltrato a veces te termina condicionando".
El lateral diestro de "Los Zorros" reconoce que "a nosotros cuando jugamos en casa no nos han arbitrado como a los locales cuando salimos de Calama. En Temuco, uno de ellos pegó cuatro patadas sin pelota de por medio y el árbitro sólo le dijo 'Cálmate, Pacheco'. En Calama, antes de empezar al partido uno les dice que traten de apurar y se terminan desentendiendo y ante las ganas de querer ganar, el arbitro te termina sacando del partido. Ya sé que harto me van a buscar pero tengo que tratar de abstraerme. Me cuesta, porque uno vive el fútbol de manera intensa".
Finalmente, el jugador transparentó por qué estuvo cerca de no llegar a Calama a principio de temporada.
"Me fui con la idea de volver, había un acuerdo y cuando volví, la dirigencia que estaba a principio de año me había cambiado todas las condiciones, nunca fue que no me quiera venir o estuviera poniendo problemas. En mi familia siempre miraban a Cobreloa aunque no eran hinchas y me crié sabiendo que este es un club grande. Ni hablar del orgullo que siento de estar en esta ciudad. Estoy cómodo en el club, he visto los avances en los últimos meses y si voy a seguir o no, eso será un tema que se verá más adelante", cerró.