Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Espectáculos
  • Clasificados
  • Servicios
  • Deportes

Cuando se pierden las confianzas

El alcalde Velásquez tiene muy poco margen para recomponer lo roto tras la filtración de los mensajes con sus asesores. Se vienen protestas, movilizaciones y un sinfín de consecuencias que será difícil sobrellevar. Un chaparrón del que si sale, lo hará muy lastimado.
E-mail Compartir

Intentos desesperados son los que realiza el alcalde de Antofagasta por minimizar las consecuencias tras la filtración de los mensajes que mantuvo por largo tiempo con sus asesores más directos en los que utilizaban no sólo un lenguaje inapropiado, sino que también clasista, racista y muy despreciativo con concejales, trabajadores y actores sociales. Las disculpas no han sido suficientes porque no se sabe si realmente sus palabras, y las de sus cercanos, eran exabruptos o realmente la opinión formada sobre esas personas.

La dimensión de estos hechos aún no son desconocidas. De hecho, gran parte del cuerpo de concejales pidió una sesión extraordinaria para remover al administrador municipal, su brazo derecho, pero eso sería solo parte de las consecuencias. Hay otras más profundas que será difícil de enfrentar e incluso pueden terminar en algo inesperado para la autoridad comunal.

Primero porque es difícil volver a mirar a los ojos a alguien a quien te referiste en forma denostativa y discriminatoria. El aludido no entenderá si quien tiene en frente, su jefe en la escala municipal, piensa lo que escribió o celebró a quien lo hizo y le será muy difícil entrar en el clima de confianza que debe existir para el desarrollo de las actividades diarias.

Es complicado volver a creer en alguien que tiene un concepto tan bajo de tu persona y por más que se esfuerce no será lo mismo.

Son varios los que atravesarán por esa complejidad. Ni hablar de cómo serán las sesiones de concejo, donde la duda estará instalada por siempre y en los momentos complicados aparecerán los fantasmas revelados en el chat y harán mucho más difícil la generación de acuerdos duraderos.

Ofrecer disculpas es el punto de partida, pero es un camino mucho más largo. La confianza cuesta en construirse pero se derrumba fácilmente y volver a levantarla demanda mucho esfuerzo y en muchas ocasiones nunca se logra.

Claro que es el peor momento en la gestión de Jonathan Velásquez. Sus asesores cuestionados y su imagen por el suelo, lejos de un partido o coalición que pueda cerrar fila ante su figura y expuesto al escrutinio público.

Las relaciones están rotas, vienen protestas, movilizaciones y un sinfín de consecuencias que será difícil sobrellevar. Un chaparrón del que si sale lo hará muy lastimado y con tareas inmediatas por subsanar.

De la arrogancia, soberbia y despotismo deberá pasar a la humildad y la búsqueda de acuerdo si quiere mantenerse en el ejercicio del poder.

La Semilla

"La fe es un patrimonio de la Iglesia, es poder que recibe todo aquel o aquella que deposita su mirada en Jesús".
E-mail Compartir

Quién posee la fe, posee el mundo. La fe es tesoro invaluable que no se transa en Wall Street o en la bolsa de valores, no se compra en joyerías de lujo, ni se encuentra en supermercados o en ferias persas. La fe tiene precio, su valor no se paga con dinero, ni acciones, ni participación en los capitales que rigen la tierra. ¿Qué es la fe, más allá de una definición o concepto? ¿Creer es sinónimo de fe? Un apostador cree que ganará, apuesta lo que tiene y gana ¿Es fe, y si pierde? La respuesta es relativa.

El diccionario define el verbo creer: Es considerar una cosa o pensar que existe sin tener certeza o prueba de ello. Jesús dice "No temas; cree solamente, y serás salva", El Apóstol San Pablo en su carta a los efesios remarca a que nadie nos engañe con palabras vanas, no creamos a todo lo que escuchemos, o leamos externamente o en nuestra mente. Probad los espíritus, nos previene San Juan. Hoy es deporte mundial creer en las redes sociales, se han producido asesinatos masivos, quema de casas, agresiones, suicidios, etc.

Por creer en las palabras vanas. El ex presidente Trump, enviaba un twitter y el mundo giraba en torno a palabras vanas; la credulidad crecía tal como el desconcierto. Es una realidad instalada. Hoy tenemos bienes escasos, y la fe ¿es escasa? Jesús preguntó lo siguiente: "Pero cuando venga el Hijo del hombre, ¿hallará fe en la tierra?"(Lu: 8) San Juan revela: "Lo nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe."

La fe no es un creer cualquiera, debemos diferenciar entre credulidad y fe. Credulidad es definida como: "Facilidad que tiene una persona para creer lo que otros le cuentan" es decir que cree con facilidad cualquier cosa, sin discernimiento alguno. Aun los demonios creen y tiemblan, nos enseña el Apóstol Santiago.

La fe es un patrimonio de la Iglesia, es poder que recibe todo aquel o aquella que deposita su mirada en Jesús, quienes mueren en la cruz y resucitan en la cruz junto con Cristo, los que obedecen el mandamiento de creer en Jesús, los que mueren en el bautismo y resurgen del agua y del Espíritu de Dios.

El autor del Principito escribe que lo esencial es invisible para los ojos. Moisés se movía como mirando al Invisible, es un poder que mira y camina en la realidad que no se ve. La fe es de quien posee el "creer" de Jesús. Este poder bajó de lo alto, traspasando escudos invisibles que rodean el planeta, plantando la semilla de la cruz.

"Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús."Ap.14 "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá." Iglesia, la fe de Jesús es la semilla de la cruz en nosotros, se riega día a día con la obediencia como mirando al Invisible, plantando la semilla.

Sergio Lagos Luciano,

Pastor Evangélico

Minería y descentralización real

"Hoy estamos en el centro del combate al cambio climático aportando a la electromovilidad y minería verde; hoy somos líderes en energías renovables". Marko Razmilic, Presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta
E-mail Compartir

"Las políticas públicas deben pensarse con y desde las regiones. No queremos que las decisiones trascendentales de la vida en nuestros territorios se sigan tomando desde Santiago sin pertinencia local. Avanzar en descentralización significa que la democracia cobra vida en cada uno de los rincones de nuestro país".

Estas palabras pertenecen al Presidente Gabriel Boric en su Cuenta Pública. Ante tal declaración no podemos más que aplaudir y apoyar para que este histórico anhelo se concrete.

El gran desafío es ¿cómo lo hacemos realidad?

Nuestra región es la segunda con mayor PIB del país y principal región exportadora. Somos claves en la creación de riqueza para Chile gracias a nuestra minería y su virtuosa familia de encadenamientos productivos. Hoy, ya no somos una región minera tradicional, hoy estamos en el centro del combate al cambio climático aportando a la electromovilidad y minería verde; hoy somos líderes en energías renovables y su proyección al hidrógeno verde; somos líderes en desalación de agua de mar para consumo humano e industria; somos una potencia turística y astronómica, y somos un robusto eje portuario logístico que nos posiciona estratégicamente para la integración bioceánica. Exponor 2022, con más de 700 empresas participantes, 28 países presentes y Alemania como país invitado, es una muestra concreta de lo que hemos avanzado y logrado.

Estamos viviendo lo que hace tres décadas era un sueño lejano. Sin embargo, todavía tenemos urgentes desafíos pendientes en lo social (salud, educación), ambiental, innovación, tecnología, desarrollo de empresas locales.

Para seguir avanzando y enfrentar estos desafíos pendientes necesitamos desplegar toda nuestra potencia minera y energética. Pero la continuidad de este proceso está lejos de transitar por el indispensable camino de certidumbre. En efecto, hoy, la industria minera y sus encadenamientos se enfrentan a importantes incertezas producto de la discusión constitucional.

El Estatuto Constitucional de los Minerales es un texto brevísimo de solo seis artículos donde no aplica "menos es más". La falta de acuerdo terminó en un texto que no garantiza más y mejor minería

Que la minería no tenga suficiente certeza constitucional, abre la posibilidad a que los temas esenciales para la seguridad jurídica en el largo plazo, sean regulados por leyes ordinarias, que podrían aprobarse por mayorías circunstanciales que periódicamente podrían alterar las reglas básicas para la estabilidad.

Apoyamos la propuesta del Presidente Boric, pero no queremos que quede solo en deseo, sino que sea una realidad en nuestra región. Si se debilita a la minería, se debilita el desarrollo de las regiones mineras, la descentralización y el protagonismo regional.