Sin avances
A cuatro años de producirse el llamado estallido social, aún permanecen sus nefastas consecuencias. Pese a que en un principio se vio como una justa rebeldía contra el alza de 30 pesos que sufrió la locomoción colectiva, a los pocos días se desató un verdadero estallido de violencia, con manifestaciones y disturbios en Santiago, para luego propagarse hacia todo el país, creando un clima de terror e inseguridad.
Se ha especulado mucho sobre el tema, pero no cabe duda que su finalidad era producir un desconcierto y malestar tan grande hacia el gobierno y rechazo hacia las autoridades de la época, que cualquier propuesta o acción de aquellas era mal interpretada y rechazada. Lamentablemente, esta acción tuvo un factor de apoyo preponderante entre parlamentarios de izquierda, que avalaron esos comportamientos nocivos y llenaron los escenarios con frases subversivas que hacían crecer un ambiente propicio para seguir aumentando el rechazo hacia quienes estábamos en el lado de querer establecer la paz y la armonía.
La finalidad fue convencer a los descontentos que la única manera de avanzar era cambiar radicalmente de rumbo político y es ahí como se instauró un gobierno de izquierda, a manos de esos jóvenes que marchaban instigando las protestas. A ellos se les vio como los salvadores y se les dio la confianza de dirigir el país; nada más erróneo, nada más nefasto, con personajes que su único objetivo ha sido robar el dinero de todos los chilenos y chilenas.
Ya vamos en la mitad del período del Presidente Boric y no vemos un futuro favorable, sin un atisbo de cambio y menos de avance económico, social y de justicia. Sin embargo, tengo plena confianza que lograremos revertir la situación y conformar un próximo gobierno que nos represente a todos y donde se actúe con sentido común y tengan cabida la unión, la igualdad, el respeto, el desarrollo armónico del país y la seguridad para todos y cada uno de nosotros.
Andrés Celis Montt Diputado (RN)
Presupuesto de Defensa
Me asombra la decisión del Gobierno de suspender los fondos correspondientes a la gestión de activos de la Defensa Nacional durante 2024. Cuando se autoriza una adquisición de un sistema/equipamiento militar, los costos del ciclo de vida de dicho activo, i.e., preimplementación, implementación, operación y mantenimiento, se comprometen en el presupuesto fiscal de los gobiernos vigente y venideros, según sea el caso. De ser aceptada la instancia presupuestaria 2024 en comento, se estaría desconociendo una responsabilidad contraída con anterioridad por el Estado de Chile.
Es de esperar que los altos mandos institucionales presenten al Gobierno un análisis detallado del efecto negativo de dicha resolución. En la práctica, esta impondría una seria limitación a la fase más importante: operación y mantenimiento, la que en términos generales equivale entre 60%-70% del costo total del ciclo de vida de un sistema de defensa. A modo de ejemplo, el ciclo de vida de un buque de guerra puede alcanzar 30 años o más.
Gustavo M. Astorquiza
Agradecimiento
En nombre de Sitios Bíblicos, Agencia de turismo que organiza peregrinajes a Tierra Santa, queremos manifestar los valiosos aportes recibidos por parte de las embajadas de Israel y España, a través de sus embajadores, cónsules y agregados de las Fuerzas Armadas, como también del personal de la Agregaduría Naval en Israel; que han permitido que las 23 personas que peregrinaban conociendo lugares sagrados, pudieran ser repatriadas a través de la Fuerza Aérea de Chile en sus vuelos humanitarios, estando en todo momento atentos a nuestro estado de salud, bienestar e integridad personal.
Agradecemos las atenciones humanas y profesionales, que reflejaron una respuesta oportuna y de calidad nacional. Ha sido un momento duro para todos los chilenos y demás nacionalidades en suelo israelí, siendo el Estado de Chile el segundo en reaccionar para repatriar a compatriotas, con calidez humana de la Fuerza Aérea.
Por todo lo recibido, deseamos expresar nuestro más sincero agradecimiento a las instituciones intervinientes.
Laura Cecilia Palacios coordinadora turística responsable
Efecto colateral
La actual ola de inmigrantes no ha traído progreso a Valparaíso, pero sí marginalidad, delincuencia e inseguridad, afectando gravemente la vida de la ciudad. La integración de la población de inmigrantes debe partir por el estricto cumplimiento del orden vigente y respeto por la vida nacional. No es aceptable la delincuencia, la que se debe controlar con severidad. La ciudadanía lo exige.
Joaquín Ortiz G.