De las 346 comunas con las que cuenta el país, 110 no cuentan con un Plan Regulador Comunal (PRC) propio a diciembre de 2016, es decir un 32%, por lo que se regían por instrumentos de planificación de las comunas que les dieron origen o por planes reguladores intercomunales o metropolitanos.
Por otra parte, de las comunas del país con más de 50.000 habitantes que sí tenían planes reguladores comunales propios, el 60% de estos sumaba más de 10 años de antigüedad, situación en la que está incluida Calama, ciudad que ha mantenido un crecimiento constante durante los últimos años a través de un desarrollo territorial, industrial y habitacional, el que ha sido impulsado por la minería. Por lo mismo es importante concretar la modificación del actual plano regulador comunal, instrumento de planificación relevante en una comuna, con el cual se establecen lineamientos para el desarrollo físico de las áreas urbanas.
El actual PRC de nuestra ciudad está vigente desde el año 2004 y su proceso de modificación se inició en abril del 2013, con la recopilación de antecedentes, tras este proceso de modificación permitirá a Calama crecer, ordenando el avance habitacional e industrial en forma armónica, con este paso podremos proyectar la ciudad de acuerdo a las necesidades que presenta, prevaleciendo el cuidado del oasis.
Creemos que la modificación del actual plano regulador aportará al ordenamiento urbano de la ciudad, impulsará el desarrollo inmobiliario, turístico y comercial, a través de corredores urbanos en las principales avenidas, y fomentará el crecimiento regulado en altura como también el fortalecimiento de las áreas de esparcimiento y recreación, considerando el déficit de terrenos existentes en el territorio.
Es importante que todos los actores relevantes de la ciudad, autoridades, organismos públicos y privados que aportan al desarrollo de Calama, se comprometan e involucren en ésta actualización que lidera el Municipio, generando un instrumento más adecuado para el nuevo escenario urbano de la ciudad.
Esta es una oportunidad para avanzar hacia una nueva convivencia urbana, que conlleva a una planificación que esperamos proponga: 1. una visión a largo plazo; 2. una planificación participativa, accesible y comprensible; y 3. Gobernanza, que cimiente una oportunidad real para una alianza público-privado.
Carlos Ramírez Leaño,
presidente de la CChC Calama