Unos 20 mil millones de pesos sería el monto de los daños ocasionados en regiones por el actuar de grupos vandálicos que se han desprendido de las manifestaciones de las últimas semanas.

Así lo dio a conocer el subsecretario de Desarrollo Regional y Administrativo, Claudio Alvarado, en una entrevista al diario La Estrella de Chiloé.

"Hemos terminado un levantamiento de todos los problemas de infraestructura que se han generado en las diversas ciudades por los destrozos y los daños (...) esta destrucción a nivel país nos lleva a tener un catastro de daños, a priori, del orden de los 20 mil millones de pesos", explicó Alvarado.

La autoridad detalló que el registro incluye los daños en edificios públicos, señaléticas y "todos los problemas que se generan en el diario vivir de las personas".

En ese sentido, señaló que se está trabajando en mecanismos para traspasar recursos a las regiones, "ya sea a través de la disposición de un 5% de los fondos de emergencia que disponen los gobiernos regionales, a través de recursos frescos que va a inyectar la Dirección de Presupuesto y mediante reasignaciones que vamos a hacer en la subsecretaría".

"Queremos que en el más breve plazo las regiones y los municipios puedan disponer de los recursos para que se normalice la vida de la ciudad", agregó Alvarado.

Desempleo

Otro tema que preocupa es la cantidad de empleos que se podrían perder producto de la crisis y los ataques a locales comerciales y emprendimientos.

En ese sentido, desde la Asociación de Emprendedores cifraron en más de 300 mil los puestos de trabajo que se perderían.

Al respecto, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, señaló que aún no tienen cifras exactas. "Hoy la Cámara Nacional de Comercio habla de 100 mil personas", dijo en el programa Estado Nacional.

Y aunque no tiene certeza sobre cifras de desempleo, enfatizó que este tema es una de las prioridades de su cartera. "Aquí hay un frenazo importante en pequeños y medianos empresarios y hay que hacerse cargo con el costo", indicó.

En esa línea, Briones señaló que "estamos trabajando intensamente en evaluar la situación de las pymes y del comercio y vamos a plantear próximamente un paquete de reconstrucción a la economía y de apoyo a estos empresarios que son fuente importante del empleo en Chile y que no podemos descuidar".

Redacción

Con el título "Esto es mutilación': La policía en Chile está cegando a los protestantes", el medio estadounidense The New York Times publicó ayer un duro reportaje audiovisual sobre las personas que han sufrido traumas oculares durante las manifestaciones en Chile, por disparos policiales con balines y perdigones.

El medio recopila testimonios de víctimas alcanzadas por dichos proyectiles en las últimas semanas, situación que es calificada por el medio estadounidense como "una epidemia de manifestantes que han recibido disparos de bala de la policía".

Entre los relatos se encuentra el de un joven que cuenta cómo fue agredido y el mal trato que le dieron los uniformados . "Me llega un perdigón en el ojo, Carabineros me pesca del pelo me lleva hasta la camioneta. Se empezaron a burlar de mi porque iba a perder la vista, el perdigón lo tengo adentro (...) yo sé que Dios me va a dejar igual como yo estaba", señala el afectado.

El reportaje salió a la luz en medio de las críticas a Carabineros por el uso de estos proyectiles y luego de que se diera a conocer que el estudiante de Sicología Gustavo Gatica, de 21 años, fue herido en los dos ojos por balines durante la manifestación del viernes en Plaza Italia.

El joven perdió un globo ocular de inmediato y el sábado fue operado para intentar recuperar al menos la visión parcial en el otro.

Traumas oculares

En su último informe, el INDH señaló que ha podido constatar al menos 197 personas con heridas oculares por disparos con balines o perdigones.

El Colegio Médico, en tanto, señaló que son más de 200 las personas que han perdido un ojo al menos. "Esto es muy grave. No ha ocurrido nada de esta magnitud en ninguna parte del mundo", señaló a Cooperativa Enrique Morales, presidente del departamento de Derechos Humanos de la institución.

Morales criticó al Gobierno asegurando que no ha querido escuchar las advertencias sobre el uso de ese tipo de proyectiles para disuadir las manifestaciones. "La responsabilidad de no haber escuchado las advertencias que insistentemente hizo el Colegio Médico, es inaceptable", dijo.

Lamentó además que "el Gobierno no tome las medidas para subsanar, por el contrario, empiezan a usar palabras como 'ha habido algunos errores': la verdad es que estos son horrores, no errores. Es deber de la autoridad suspender el uso de los balines".

En la playa de Reñaca, alrededor de las 15.00 horas de ayer, en el contexto de una marcha familiar, una persona resultó herida a bala en el sector 1 de la tradicional playa viñamarina, luego de que un hombre que portada un chaleco amarillo abriera fuego contra la multitud al menos en tres ocasiones.

El momento fue captado en videos y difundido en redes sociales. Según Carabineros, fue por esa misma vía que se convocó a la manifestación.

La policía uniformada explicó que el hombre con chaleco amarillo viajaba en un vehículo y que, al pasar por el sector de la protesta, "desencadenó que las personas que se encontraban manifestándose lo atacaran con piedras".

La persona herida recibió un proyectil en una pierna y fue llevada por transeúntes al Hospital Gustavo Fricke, mientras que después del hecho más de 400 personas mantuvieron violentos enfrentamientos con la policía, barricadas, incendios y saqueos en todo el borde costero reñaquino.

El presunto responsable de los disparos se encontraba al cierre de esta edición con custodia de la PDI en su casa. Se trataría de John Cobin, quien a través de la red social YouTube, y en ingles -su idioma nativo, puesto que nació en Estados Unidos- comentó que el arma que utilizó en Reñaca estaba registrada y en regla. "Hoy fui a un lugar donde se puede hacer disparos. Estaba con la pistola, tengo permiso legal para tenerlo", dijo en el video, que fue borrado.

Agregó que se sintió atacado por un grupo de jóvenes. "Tuve miedo, mi vida estuvo en peligro. Iba camino a la playa y un grupo de personas se acercaron a mí, me amedrentaron al mover mi auto, comenzaron a moverlo. Yo no quise aceptar que eso pasara. Cuando sentí mucho miedo saqué la pistola, la cargué y primero hice dos disparos. Luego disparé dos más", dijo.

Cobin en YouTube explicó que "yo no quise hacer nada malo" y contó que tras el incidente llamó a sus abogados. "Estaba súper asustado". El hombre ya estaba al tanto de que un joven había resultado herido y que su familia iba a ser trasladada a otro lugar para pasar la noche.

Según la Fiscalía local, John Cobin pasará hoy a su control de detención y debería ser formalizado.