Jonathan Mondaca Escobar
Partidos políticos, organizaciones sociales, activistas o académicos son algunos de los actores que desde hoy inician un trabajo de difusión de ideas para el plebiscito que, el 26 de abril, decidirá si el país contará con una nueva Constitución.
Y es que la instancia para definir si se redactará otra Carta Fundamental, fue parte del histórico acuerdo por la paz que firmaron en noviembre del año pasado los máximos representantes del plano político, como respuesta a la grave crisis social que inició en octubre.
En diciembre el Presidente Piñera firmó el decreto que permitirá el plebiscito constitucional el domingo 26 de abril.
Son varios los sectores que ya han manifestado su postura para este proceso. En la oposición hay acuerdo para trabajar por la opción "Apruebo" una nueva Constitución, mientras que en el oficialismo no hay unidad de criterio. En RN los militantes tienen libertad de acción y en la UDI la opción es rechazar.
Según la última Encuesta Plaza Pública Cadem, publicada a mediados de enero, un 66% de los consultados votaría por aprobar una nueva Carta Fundamental "si el plebiscito fuera el próximo domingo", y un 25% rechazaría.
En Antofagasta, integrantes del mundo académico y político explican por qué elegirán rechazar o aprobar.
Para la vicepresidenta regional de la UDI, Alejandra Oliden, la actual Constitución ha permitido el desarrollo del país y el documento solo requeriría de algunas mejoras.
En cambio para la académica de Derecho en la Universidad de Antofagasta, Fabiola Rivero, es indispensable que el país tenga una Constitución redactada en democracia.
"Es indispensable que la Constitución tenga un origen democrático"
Para la académica de la cátedra de Derechos Humanos de la Universidad de Antofagasta, Fabiola Rivero, es indispensable que la Constitución tenga un origen democrático por primera vez en la historia nacional.
La abogada está convencida de que la opción apruebo ganará el plebiscito y con ello, vendrán cambios sustanciales en la noción de un Estado social.
¿Por qué apoya el apruebo?
- Resulta indispensable generar un cambio constitucional que implique que la nueva Carta Fundamental por primera vez en nuestra historia, tenga un origen democrático, con participación de todo el pueblo de Chile.
En el caso de que ganara la opción contraria, ¿qué debería hacer la sociedad?
- No creo que gane el rechazo ya que existe una visión transversal -desde los sectores más progresistas independiente de si son cercanos a la derecha, el centro o la izquierda- sobre la necesidad de dotarnos de una nueva Constitución.
En el evento poco probable que eso sucedería, es labor del Congreso y del gobierno, debería generar una transformación trascendental, que cambie la visión del Estado subsidiario que tenemos.
¿Cuál es la prioridad a modificar en la actual Constitución?
- El Estado de derecho debiera incorporar claramente la noción de Estado democrático y social, de forma tal que los derechos fundamentales no estén solo declarados, sino que los derechos humanos sociales fueran exigibles para el Estado chileno.
Esto para que el Estado no solo estuviera obligado a realizar aquello que el privado no puede hacer, lo que es el sustento del Estado subsidiario, sino que fuera una obligación garantizar derechos como la educación y la salud.
En nuestra actual Carta Fundamental eso tiene una raíz totalmente distinta, lo que se protege es la libertad de enseñanza. En salud hemos sido testigos de lo gravoso de la intervención del Estado comprando espacios de atención quirúrgica en clínicas privadas.
¿Qué opina de las protestas?
- Estoy de acuerdo, creo en la manifestación popular como una dimensión del Estado democrático, no tengo doble visión. Soy una convencida, y así lo manifesté como gobernadora en el gobierno de la Presidenta Bachelet, que los derechos humanos de manifestación social se pueden ejercer sin ningún tipo de intromisión en orden de evitarlos.
Diferentes resoluciones de organismos internacionales han sido reiterativos en señalar que el Estado debe favorecer y generar las condiciones para la manifestación social, con pleno resguardo de sus derechos.
Quienes somos padres, no podemos decirles a nuestros hijos que tengan cuidado al momento de protestar porque pueden ser lesionados o detenidos ilegalmente.
¿Cuáles son las causas por las que llegamos a esto, y cómo avanzar en un diálogo para el país?
- El mayor error del gobierno del Presidente Piñera fue abordar el estallido social como un problema de orden público, y no como uno político.
En Antofagasta, el 19 de octubre los primeros detenidos fueron dirigentes sociales y la concejala Doris Navarro. El Estado en lugar de preocuparse de los actos de pillaje que comenzaron a las 19 horas en una farmacia, estaba preocupado de qué hacer con los partes policiales de estos detenidos.
Para el diálogo hay que perder el temor a conversar, mirando al otro como un igual y no como un potencial enemigo.
La vicepresidenta regional de la UDI, Alejandra Oliden, adelantó que votará por el rechazo en el plebiscito de abril, argumentando que la actual Constitución generó avances en el país.
Reconoce que hay temas que mejorar, como las pensiones, la salud y educación. Sin embargo, advierte que para esos cambios no es necesaria una nueva Carta Magna.
¿Por qué apoya el rechazo?
- No podemos desmerecer la actual Constitución, el país ha ido por un buen rumbo y no siento la necesidad de cambiar.
La gente se equivoca si piensa que cambiando la Constitución habrá mejoras en las pensiones, en salud o educación. Todas estas cosas se pueden mejorar reformando ciertas leyes, que nada tienen que ver con la Constitución.
Lo digo de forma personal, hay familias de clase media baja que han podido progresar, porque este es un país que le da herramientas a todos, para que el que quiere trabajar y progresar, lo pueda hacer.
En el caso de que ganar la opción contraria, ¿qué debería hacer la sociedad?
- No me pongo en ese escenario, será imposible que gane, creo que la gente pensará bien, no se va a equivocar y el rechazo va a ganar.
¿Cuál es la prioridad a modificar en la actual Constitución?
- Como dije, siento que esta Constitución ha permitido que el país esté en vías de desarrollo, algo que no todos nuestros vecinos pueden decir. A nivel latinoamericano estamos bastante bien, pero muchos esperan que el Estado entregue todo de manera gratuita y eso no puede ser porque al Estado no le alcanza.
Sí creo que la actual Constitución requiere algunas reformas, pero éstas pueden realizarse en el Congreso. También deberíamos tener un plebiscito para que la gente diga qué cosas son las que deberían cambiar.
¿Qué opina de las protestas?
- En la actualidad no he participado de las manifestaciones ya que se desvirtuó lo que se pretende. Las personas tienen demandas que son válidas, como los temas de salud y educación, que deben cambiar.
Pero la manera en que se desarrolla esto ha llevado a destrucción y terrorismo, perjudicando al país y emprendedores, por ejemplo, que fueron los más afectados con toda la destrucción.
Por eso no avalo las manifestaciones, la gente debería ser más consciente y no acudir hasta que esto se calme.
Con la destrucción no se consigue nada y todo lo contrario, se perjudica a la economía, los emprendedores pierden todos sus recursos y hay cesantía.
¿Cuáles son las causas por las que llegamos a esto, y cómo avanzar en un diálogo para el país?
- Los principales responsables de lo que ha pasado son los parlamentarios, ya que ellos tienen las armas para cambiar ciertas cosas y realizar reformas, como mejorar el sistema de pensiones, en el que nuestros adultos mayores viven con una miseria.
Siempre se culpa a la derecha, pero el Parlamento ha sido en su mayoría de centro izquierda y ellos no trabajaron para la gente.
Tenemos problemas de entendimiento entre nosotros y eso genera rencores y distanciamiento en amigos y familiares. Más allá de lo político, para avanzar en un diálogo necesitamos unirnos para mejorar nuestro país, ya que lo sucedido nos ha dañado a todos.
"La Constitución ha permitido que el país esté en vías de desarrollo"