Malos resultados medioambientales
Pese a las restricciones de este año, la situación ambiental del planeta sigue siendo muy mala, lo que tiene efecto en el aumento de las temperaturas. Es importante tomar conciencia del problema en el que estamos involucrados y asumir compromisos individuales y colectivos que garanticen la vida de las personas y del planeta.
Se cumplen cinco años del Acuerdo de París donde los países se comprometieron a impulsar medidas para reducir el cambio climático. Como es sabido, a pesar de que ha habido confinamientos en muchas ciudades del mundo debido a la pandemia de covid 19, la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera no disminuyó este año, y se mantiene el nivel récord alcanzado en 2019, según cifras del Boletín Anual de la Organización Meteorológica Mundial.
La concentración en la atmósfera de los principales gases de efecto invernadero -dióxido de carbono (CO2), metano (CH4) y óxido nitroso (N2O)- marcó un récord durante 2018. En el caso del CO2, el principal de estos gases responsables del calentamiento global, habría que retroceder al menos tres millones de años para encontrar una concentración tan grande en la atmósfera, cuando ni siquiera existían los seres humanos. El planeta registra récords de temperaturas, desde 2015 hasta el presente año, que son considerados los más cálidos de la historia, desde que hay mediciones fiables.
Un efecto concreto es que la mayoría de los altos registros de calor en el planeta se han concentrado en los años recientes. El Servicio Europeo Copernicus Sobre el Cambio Climático ha informado hace unos días que noviembre de este año fue el mes más caluroso, con temperaturas 0,77 grados Celsius más altas que el promedio entre 1981 y 2010.
Nuestro planeta está sometido a cambios y desafíos de enorme magnitud, los que son causados por el hombre. Aguas y territorios contaminados, más enormes emisiones de gases de efecto invernadero, que tienen a nuestro hábitat en un cambio con insospechadas consecuencias. El aumento de las temperaturas es un efecto de ello.
Chile es un país pequeño e influye poco en esta realidad, pero está haciendo lo suyo, en especial en el sector energético, donde en un plan por etapas se están cerrando las plantas generadoras termoeléctricas a carbón, junto con desarrollar energías renovables no convencionales, especialmente las solares.
En este plano, el país jugará un enorme rol, porque esta crisis, es una oportunidad para Chile.