En la víspera de la marcha opositora convocada para esta jornada en Cuba por la oposición, el Gobierno retiró acreditaciones de prensa a seis periodistas internacionales, y aunque luego restituyó dos de ellas, esto no sirvió para aplacar la condena transversal por lo que se consideró un "ataque inaceptable" contra la libertad de expresión.
La decisión de las autoridades de Cuba contra el equipo de prensa de la agencia de noticias Efe en la isla, provocó una cascada de reacciones, desde Gobiernos como Estados Unidos hasta organismos como la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El ministerio español de Asuntos Exteriores convocó al encargado de negocios de la embajada de Cuba en Madrid, máximo responsable de la legación ante la ausencia de embajador, para pedir explicaciones sobre esta medida que Cuba toma por primera vez hacia una agencia internacional.
Un llamado urgente
Ayer los responsables del Centro de Prensa Internacional (CPI) de Cuba convocaron con urgencia al equipo de Efe acreditado actualmente en La Habana -tres redactores, un fotógrafo y un camarógrafo- para comunicarles que se les retiraban las credenciales, sin aclarar si la medida era temporal o definitiva.
La disposición fue adoptada un mes y medio después de que le retiraran la acreditación al coordinador de redacción de Efe en La Habana.
Las autoridades de la isla advirtieron al equipo que no puede realizar su labor periodística y no quisieron aclarar los motivos exactos.
"Esperamos que el Gobierno lo reconsidere. La Agencia Efe es un medio objetivo y responsable que informa sobre la isla desde hace más de 40 años y no entiende las razones de esta medida", reclamó la presidenta de Efe, Gabriela Cañas.
Por su parte, la Unión Europea (UE) pidió "aclaraciones" a las autoridades cubanas tras la retirada de credenciales de prensa, lo que podría significar una "grave vulneración de la libertad de expresión".
"Hemos visto la información. Lo estamos investigando y solicitando aclaraciones a las autoridades cubanas y estamos en contacto con Efe", dijo Nabila Massrali, vocera del jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell.
También la Federación Internacional de Periodistas (FIP), la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y Reporteros sin Fronteras, fueron algunos organismos que condenaron la medida y la definieron como un "ataque inaceptable contra la libertad de información".
Después de que la medida tuvo una gran repercusión, el Gobierno cubano ofreció devolver las credenciales de dos de los seis periodistas de Efe afectados, algo que la dirección de la agencia consideró "insuficiente". La restitución fue confirmada por el CPI cubano para una redactora y un camarógrafo.
Mientras el presidente cubano Miguel Díaz-Canel se aprestaba a participar en un acto "antiimperialista" previo al 15N, la CDIH consideró la medida "arbitraria" y EE.UU. pidió reponer todas las credenciales y llamó a la comunidad internacional "hablar con una sola voz" en apoyo a quienes se manifiesten hoy.
El secretario de Estado, Antony Blinken, pidió además al Gobierno de La Habana liberar a "todos los detenidos injustamente", " aprovechar esta oportunidad histórica de escuchar las voces de sus pueblo".
EE.UU. respondió con sanciones a altos cargos militares cubanos por su presunto papel en la represión de las protestas del pasado 11 de julio, las mayores en más de dos décadas.
Claves de la jornada
Las marchas de hoy fueron convocadas por la plataforma Archipiélago, fundada por el dramaturgo Yunior García (ver recuadro) a raíz del 11-J, para reclamar la democratización de Cuba y la liberación de presos políticos.
El permiso fue denegado en todas las ciudades donde fue solicitado, por considerarse una manifestación ilegítima y organizada por EE.UU. para desestabilizar al Gobierno de la isla.
El Departamento de Seguridad del Estado (DSE), órgano de inteligencia y contrainteligencia de Cuba, en los últimos días ha multiplicado las citaciones e interrogatorios a ciudadanos críticos para disuadirlos de unirse a la marcha. A la vez, la presencial policial se ha incrementado notablemente.
El pasado 11 de julio hubo quejas de violencia policial y se observaron imágenes de agresiones a manifestantes y periodistas. Las protestas en todo el país se saldaron con un muerto, más de un millar de arrestados y decenas de condenas de cárcel.
Las protestas de hoy ocurrirán el mismo día en que Cuba reabre sus puertas al turismo internacional, una "fiesta", según las autoridades, que no quieren empañar.
Pero los cubanos sufren desde hace meses una gran escasez, que afecta incluso a los alimentos, las medicinas y la ropa. Esto ha provocado grandes colas frente a las tiendas y una inflación desatada, lo que ha incrementado el descontento exacerbado ya por la pandemia.