Aries

Amor: ¿Están dispuestos a generar un cambio verdaderamente estructural en la relación?Trabajo: En cuanto a la parte financiera, cuida más tus gastos. Intenta armarte un plan para ahorrar algo.

Del 21 de marzo al 19 de abril.

Escribo con pena, pleno de recuerdos. Lo hago contemplando un afiche de perfiles políticos. Muestra a un joven Floreal Recabarren y el número de su papeleta electoral. El maestro de historia, el que nos hablaba de hugonotes y Carlos Martel, el que -sobre una mesa- nos explicó el abordaje de Prat, alternaría el aula con el hemiciclo municipal… La radio promovía con insistencia: "L-36… L-36…L-36…". Sus alumnos repetíamos la cantinela, sin pensar que promovíamos su elección.

El tiempo y sus logros, lo llevaron al curul edilicio… Y hasta se hizo congresista, porque la ciudad depositó en él, la confianza del sufragio. Sus logros han dejado la ciudad plena de huellas de su generoso quehacer. Y -como era de esperar- sufrió vejámenes y agravios que no lograron doblegar su porfía nortina.

El paso de los años nos hizo colegas y pude -también- embarcarme en el noble oficio de maestro.

Recibí sus consejos, que me ayudaron a retirar las piedras del camino, combatiendo a los obtusos de siempre con el arma de la razón. ¡Qué grandes muestras de su grandeza nos dejó "Don Floro".

Desde hoy, comenzamos a sentir y a sufrir su ausencia. Pero por encima de todo, quienes seguimos en estas lides, defendiendo lo que nos pertenece o nos corresponde, debemos asumir el mayor de los compromisos para honrar su memoria.

A reconstruir la historia del Norte Grande. A buscar esas verdades que nos fueron negadas. "Don Reca" dio los primeros pasos. Nos corresponde seguirlos, entendiendo que será una tarea ardua. Como me lo señaló una vez… "Los molinos del Quijote fueron descritos para estimular los desafíos, sin claudicar". Sabemos dónde y quienes representan esos molinos en la sociedad actual. A ellos enfrentaremos, porque hay que devolverle la verdad a los hechos pasados.

El tiempo dirá si sus ex alumnos respetamos sus sugerencias, que eran casi mandatos. Llegaremos algún día a su lado, con nuestros papeles bajo el brazo, para decirle: "Don Floro", hemos cumplido parte de la tarea… Los antofagastinos estamos pagando la deuda con el ayer. Siga Usted descansando en paz, que no lo defraudaremos".

Jaime n. Alvarado García, profesor normalista, periodista, escritor