Tráfico o pesca incidental: las hipótesis en torno a los tiburones en el vertedero
INVESTIGACIÓN. Académico de la UA, Carlos Bustamante y el seremi de Medioambiente, Rafael Castro, explicaron las peculiaridades del caso. Desde Sernapesca descartaron comercio ilegal.
El hallazgo de 17 cuerpos descabezados de tiburón en un vertedero clandestino en el sector norte de la ciudad, hace nueve días, más que sorpresa causó preocupación entre las autoridades e investigadores pertinentes.
Básicamente porque varios de estos especímenes tenían aletas cortadas desde la base -lo que se conoce como la práctica del aleteo-, y que eventualmente podría sugerir un comercio ilegal de este producto (un platillo de sopa de aleta de tiburón en China, puede llegar a costar 150 dólares). No obstante, explican los expertos, aun es muy pronto para confirmar que se trata de un caso de tráfico de aletas de tiburón.
Así lo expuso el director regional del grupo de expertos de tiburones de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, Carlos Bustamante, quien es además académico e investigador de la Universidad de Antofagasta, adonde fueron remitidos los cuerpos tras la denuncia del hallazgo.
"Lo que pasa es que hay un incumplimiento en la normativa respecto de la distribución final de estos cuerpos, lo que no significa que sea ilegal. Hay un mal proceso del desembarco de estos animales, porque la ley dice que los tiburones deben ser desembarcados completos, o sea, con sus aletas naturalmente adheridas al cuerpo", sostuvo el especialista en tiburones.
Origen
El investigador explicó además que otra de las hipótesis que toma fuerza, es que estos ejemplares hayan sido traídos desde otras comunas o regiones para ser vendidos en Antofagasta, pero finalmente terminaron en la basura.
"Los pescadores artesanales de Antofagasta dicen que no capturan este animal ahora. Antes había una lancha que sí lo hacía, pero ya no, hace años, y por lo general los desembarcos artesanales del (tiburón) Marrajo están en Taltal o Iquique", dijo.
Sobre el punto, el seremi de Medioambiente de Antofagasta, Rafael Castro (quién hizo público el caso del vertedero clandestino y los tiburones hace nueve días), explicó que no hay antecedentes de este tipo de pesca en la zona.
"Pondremos el informe y todo lo que tenemos para disposición de las autoridades y policías pertinentes, estamos hablando de Sernapesca, de la Bidema, de la PDI, que son las entidades que están estudiando el caso. Tenemos que esperar a que ellos se pronuncien. Lo que puedo señalar es que de acuerdo a la normativa, esa práctica (cortar las aletas), está prohibida expresamente en Chile", dijo.
Pesca incidental
Por su parte, el director regional de Sernapesca, René Salinas, descartó que tanto la muerte como desmembramiento de estos ejemplares, se deba a la acción clandestina de pescadores. De hecho, explicó que muchos de estos tiburones son atrapados por la pesca incidental, en la búsqueda del pez espada (albacora).
"La pesquería del tiburón, que en este caso está permitido en Chile, sale principalmente de la pesca incidental que hay sobre el recurso del pez espada, por parte de estas embarcaciones artesanales que son lanchones que andan con redes y cuando capturan albacoras, de repente salen tiburones; es como un acompañante de la pesquería del pez espada", dijo.
El director explicó también que uno de los hechos que podría eventualmente descartar el tráfico de estas aletas, pasa porque a algunos de estos ejemplares no se las cortaron, pero sí sus cabezas.
"Los tiburones tenían la mayoría de sus aletas. Lo más probable es que después de su procesamiento y de su eviscerado, le sacaron la cabeza y dejaron solo el cuerpo; quizás es normal que solo en algunos casos, se les corte la cola. Los tiburones que estaban en el vertedero tenían la mayoría de las aletas", sostuvo.
"Viejos"
Otras de las hipótesis que se maneja, es que los tiburones encontrados en el vertedero clandestino fueron pescados y refrigerados hace mucho, lo que fue mermando la calidad de su carne, para finalmente ser desechados.
"Con el frío de la cámara, al no tener una protección, se quema la piel, la carne, y eso hace que al final no se pueda vender. Así que si alguien se vio en el problema, lo más probable es que lo haya eliminado. Lo lamentable es que lo hizo en ese lugar", dijo el director de Sernapesca.
"Hay que ser justos y esperar los resultados. No podemos hablar de trafico todavía, ya que la mayoría tenía sus aletas".
Carlos Bustamante,, académico UA