La Comisión de Normas Transitorias de la Convención Constitucional aprobó ayer dos de las normas más controvertidas que pasarán al pleno para su discusión: la fecha en que se pone fin al actual Senado y la que establece un quorum de dos tercios para que el actual Congreso pueda hacer reformas a la nueva Constitución si esta es aprobada en el plebiscito de salida el 4 de septiembre.

A primera hora la Comisión de Preámbulo dio una señal de unidad al aprobar cuatro enmiendas que servirán de introducción al texto que se propondrá a los chilenos y que es encabezado por un párrafo que establece que "nosotras y nosotros, el pueblo de Chile, conformado por diversas naciones, nos otorgamos libremente esta Constitución, acordada en un proceso participativo, paritario y democrático".

Sin embargo, luego vinieron las indicaciones polémicas correspondientes a la comisión que debe establecer plazos y normas para poner en marcha la nueva institucionalidad.

El más resistido por los actuales integrantes del Senado pasó al pleno: "Todos los integrantes del Senado terminarán su mandato el 11 de marzo de 2026, independientemente de la fecha de su elección".

Esto corta a la mitad el periodo de los senadores recién electos en el último proceso y que asumieron en marzo, pues según la Constitución vigente duran en su cargo ocho años.

De esta forma, se da paso a la primera elección de la Cámara de las Regiones, que reemplazará al actual Senado como complemento del futuro Congreso de Diputadas y Diputados".

La propuesta también señala que la elección de gobernadores regionales y asambleístas regionales, miembros de la futura Asamblea Regional, será el mismo día que las elecciones de alcaldes y concejales: el domingo 27 de octubre. Iniciarán sus funciones el 6 de enero de 2025.

Los dos tercios

Otro punto controversial, vinculado al anterior, fue el que proponía establecer un quorum de dos tercios para que el actual Congreso pueda reformar la nueva Constitución en caso de que sea aprobada.

El vínculo con el fin del senado se establece en que se le dificulta al actual Parlamento cambiar las futuras normas, entre ellas la que termina con el Senado. Con la aprobación de los dos tercios como quorum se permitirán cambios constitucionales con otras votaciones a partir de 2026.

Esta propuesta fue planteada por un amplio grupo de colectivos de centroizquierda. Sin embargo, tras su inclusión recibió críticas desde la derecha que acusó que se buscaba poner un candado para evitar los cambios con ese quorum que según convencionales como Hernán Larraín (Evópoli), quien aseguró que esto "hacía imposible" cualquier intento de reforma posterior a la eventual nueva Constitución.

"Ejercer los dos tercios en materias que ni siquiera en la actual Constitución se establecen así es una posición arbitraria y demuestra un pánico escénico de los convencionales de que pueda modificarse el texto que ya fue aprobado en borrador", comentó el convencional Raúl Celis (RN).

Incluso el presidente del Senado, Álvaro Elizalde (PS), afirmó que esta norma "incentiva a votar Rechazo". Sin embargo, desde dentro de la Convención César Valenzuela, integrante del Colectivo Socialista, aclaró que "esto tiene que pasar el pleno, y mirando las opiniones de los distintos colectivos, seguramente esto volverá a la comisión para una nueva discusión".

¿Límite de Armonización?

Esta discusión se cruza con otra que se dará la próxima semana en la Comisión de Armonización, ya que como el borrador de normas permanentes no contiene un quórum para reformas constitucionales, algunos estiman que hay un vacío que debe ser llenado en esta instancia.

Amaya Álves (Frente Amplio) comentó que "esto se relaciona, en parte, con una norma que me parece que es una de las incongruencias de la propuesta que creo vamos a tener que, al menos, evaluar abordarlo en armonización. Esto es que la reforma a la Constitución no quedó con un quórum que hable de la supremacía constitucional".

Respecto de este tema los convencionales Felipe Harboe y Agustín Squella enviaron un oficio a la mesa de la Convención para pedir que aclare hasta dónde llega la atribución de la instancia.