Giovagnoli y los cuestionamientos: "Puedes estar destrozado pero nunca derrotado"
ADVERSIDAD. El DT de Cobreloa enfrenta las duras críticas tras la última derrota que dejó a su equipo en zona de descenso directo. Reconoce que la confianza está intacta y pide respaldo en momentos en que aflora el pesimismo entre los hinchas.
Si se hace el balance más frío de todos, a Dalcio Giovagnoli no le resultó nada en la expedición de Cobreloa a La Florida. No sólo porque se perdió ante un rival directo, cayendo por segunda vez desde que está en la banca naranja a la zona de descenso . La conclusión escapa al mero resultado y surge por el análisis del funcionamiento, ese mismo que tiene al entrenador asumiendo por primera vez la crítica transversal.
Incluso hay algunos que piden la salida del adiestrador, justo en momentos en que la desesperación empieza a dominar el discurso partidario por un equipo que de jugar a jugar, otra vez ratificó que es uno de los más débiles de la competencia. "Nosotros sabíamos que nos podíamos encontrar con este tipo de adversidad cuando asumimos la banca y pese a que hoy es situación límite, ya la hemos vivido en otros clubes y entendemos lo que se debe hacer. Es momento de transmitirle confianza al grupo porque quedan seis fechas y no es momento para bajar los brazos ni decaer. Lo mismo debe ser para la gente. Uno entiende la decepción pero nosotros estamos enteros, hay confianza en que podemos salir de ese lugar incómodo en la tabla y por eso, necesitamos en respaldo de la gente más que nunca", dijo antes de abordar el vuelo que lo trajo de vuelta a Calama.
La sensación tras la nueva derrota -la sexta desde que está en el cargo- no fue tan distinta a nivel mediático en el norte como en la tribuna floridana el pasado sábado. Hay frustración, asoma el pesimismo y lo que se intenta desde la banca no termina reflejándose en los números. Entonces, los pequeños avances -como el tema actitudinal que en el último juego superó al de fechas anteriores- pasa prácticamente inadvertido. "Yo diría que lo que hicimos en el primer tiempo contra Audax sí mostró un avance porque se notó que el equipo tuvo mayor agresividad en el juego y también a la hora de recuperar el balón. Eso se vio pero queda invisible ante la falta de efectividad que seguimos padeciendo y que, ante cualquier incoordinación como la que tuvimos en los dos goles en contra nos termina dejando con las manos vacías", asume el adiestrador.
Críticas
Pese a los pedidos desaforados de cierto sector por cambiar al DT antes de las seis fechas finales, quizás apelando a un último remezón del plantel, la realidad indica que a nivel dirigencial no van a cometer ese error fatal de partir otra vez de cero a esta altura del año. Y desde el lado del cuerpo técnico no se piensa dar un paso al costado.
"Fue una derrota dura, de esas que te golpea fuerte. Uno es humano también y sin duda que te afecta por todo lo que significa y todo lo que estamos viviendo. Pero como en el dicho, uno puede estar destrozado pero nunca derrotado y eso debemos hacérselo sentir a los jugadores. Se jugó ante un rival directo, se perdió un partido que queríamos ir a ganar pero hay que pensar en Ñublense, en que vamos a enfrentar a un equipo ordenado, que tiene un muy buen sistema de juego y al que debemos ganarle porque cada vez se acorta más el margen", expresó el santafesino.
¿Cambio de sistema? Hay dos decisiones tácticas del estratego que son cuestionadas tras la última caída. Primero, la inclusión de Yerko Águila -de correcto partido pero sin destellar- en la banda izquierda de la defensa, considerando que venía sin regularidad, dejando fuera al el seleccionado chileno Patricio Romero, que suma minutos Sub 21 y juega por ese sector. Además de dejar nuevamente en banca al flamante refuerzo uruguayo, Mauro Brasil.
Y también, la decisión de mantener el esquema de 4-3-3, uno con el que Giovagnoli no ha conseguido resultados positivos en la última parte del campeonato. El técnico se defiende y argumenta que "hemos venido probando otros sistemas y la idea era trabajar desde una propuesta más ofensiva para llegar a generar peligro y eso se vio antes del primer gol de Audax. Pero no siento que esta derrota pase por un tema táctico o de sistema de juego, sino más bien por desatenciones que nos terminan costando goles, sumado a que las ocasiones que nosotros generamos no se convierten. La forma de jugar que tenemos es la que mejor le acomoda a los jugadores pese a que hemos ensayado otras tratando de darle una vuelta al asunto de la poca producción en el arco contrario".
Aún así, el trasandino no busca excusas y pone el pecho. "Los responsables de lo que está pasando somos nosotros en el cuerpo técnico y también somos los encargados de buscarle una solución futbolística. Uno podría excusarse en que hay muchas situaciones que se fueron dando a través del campeonato, como que hayan jugado seis centrodelanteros y ninguno solucionó el problema. Pero no soy de poner escudos por delante y asumo mi papel en este momento del equipo. Hay que hacerle frente a la presión y pensar en ganarle a Ñublense en casa", cerró.