Los científicos constatan que la capa de ozono "está realmente en fase de recuperación"
METEOROLOGÍA. Se pudo comprobar que el agujero sobre la Antártica este año es uno de los más pequeños que se ha podido observar nunca.
Los científicos comprobaron, a través de sus constantes observaciones y mediciones, que la capa de ozono se encuentra realmente en fase de recuperación a largo plazo y que la concentración en la atmósfera de las substancias que le causan daño continúa disminuyendo, dijo la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
"Dado que algunas sustancias que agotan la capa de ozono también funcionan como gases de efecto invernadero, su eliminación gradual es una ventaja añadida para el clima", señala el boletín anual sobre la situación de la capa de ozono que produce la organización.
No obstante, la entidad también enfatiza que no hay que dar todo por ganado y que el seguimiento del estado de la capa de ozono y, en particular, del agujero que tiene sobre la Antártida, debe continuar.
Esta información fue difundida coincidiendo con el Día Mundial del Ozono, que celebra el Tratado de Montreal, considerado el tratado medioambiental de mayor éxito de todos los tiempos ya que condujo a la eliminación progresiva de las sustancias nocivas para la capa de ozono.
Los especialistas consideran que este es el momento de ir más allá en el cuidado de esta capa que envuelve la Tierra y reduce la parte de la radiación que llega a la corteza terrestre.
Para ello se pidió avanzar en la eliminación gradual de los hidrofluorocarburos (HFC), gases potentes que calientan el clima, lo que se considera más importante que nunca en vista de los récords de temperatura de los últimos tiempos.
Si se mantienen las políticas actuales, se espera que la capa de ozono recupere los valores de 1980 (antes de la aparición del agujero de ozono) hacia 2066 en la Antártica, hacia 2045 en el Ártico y hacia 2040 en el resto del mundo.
Día internacional
Como cada 16 de septiembre, este lunes se celebró el Día Internacional de Preservación de la Capa de Ozono frente al "agujero" que se produce cada año en el fino escudo de gas en la atmósfera, y que se está recuperando, según las observaciones. En 2024 está siendo de hecho de los más pequeños hasta el momento.
Dicho agujero se produce cada año desde principios de la década de los ochenta, debido a los altos niveles de sustancias destructoras de la capa de ozono que la humanidad ha ido emitiendo, según los expertos.
En 2023 el agujero de la capa de ozono "fue uno de los más grandes observados, mientras que el de 2024 está siendo uno de los más pequeños", asegura la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), de España.
"Este hecho forma parte de la variabilidad climática y no contradice la recuperación de la capa de ozono que se viene observando", según la autoridad meteorológica, una de las entidades que participa de forma activa en la vigilancia mundial de la capa de ozono.
Más tarde
También el servicio de vigilancia atmosférica de Copernicus informó sobre el agujero de ozono en la Antártica y ha avanzado que "comenzará a formarse más tarde de lo previsto en 2024".
"Esto se relaciona principalmente con cambios en las temperaturas y patrones de viento en la estratosfera de la región, lo que lleva a un inicio retrasado del proceso de agotamiento del ozono", explica.
En condiciones meteorológicas normales, el agujero comienza a formarse a mediados o fines de agosto y se cierra hacia fines de noviembre.
"Hay una gran cantidad de factores que influyen, directa o indirectamente en la formación del agujero de ozono en la Antártica. Sin embargo, ninguno tiene tanto impacto como las sustancias antropogénicas que agotan la capa de ozono", explicado Laurence Rouil, director del Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus.
100 sustancias malignas
Por su parte, la directora del Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente (también de España), Ana Barreira, explica que gracias a "un esfuerzo internacional conjunto impulsado por la comunidad científica, se ha conseguido exigir el control de casi cien sustancias químicas perjudiciales para el ozono".
En 2023, el agujero de ozono se abrió pronto y de forma rápida, convirtiéndose en uno de los más grandes registrados a mediados de septiembre, y uno de los de mayor duración observados hasta la fecha.
De acuerdo a las observaciones de la Nasa, el año pasado el agujero de ozono antártico tuvo una extensión media de 23,1 millones de km2, alcanzando un máximo de 26 el 21 de septiembre.