Las nuevas variantes del coronavirus consideradas más peligrosas avanzan por Brasil y ya son predominantes en al menos un cuarto del país, que enfrenta la peor fase de la pandemia. El Gobierno, mientras tanto, anunció el desarrollo de una vacuna anticovid de factura brasileña.

En la última jornada, Brasil registró 75.337 casos, el máximo diario mundial, mientras reportó 1.760 fallecidos y tres cuartas partes del país tiene más del 80% de sus camas de terapia intensiva ocupadas.

La intensa alza de contagios se atribuye a la presencia de las llamadas "variantes de preocupación". En al menos siete de los 27 estados brasileños, más de la mitad de los casos detectados corresponden a la mutación de las variantes detectadas en Reino Unido, Sudáfrica y Brasil, según la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), centro de investigación médica referencia en Latinoamérica.

Reinfecciones comunes

En Amazonas, Ceará, Pernambuco, Río de Janeiro, Río Grande do Sul, Santa Catarina y Paraná los hospitales están al límite, especialmente en los tres últimos, que conforman la región sur del país.

En tanto, la variante brasileña, conocida como P.1 y originaria de Amazonas, ya está presente en casi todo el territorio nacional.

Por otro lado, cada vez son más los indicios que apuntan a que la variante brasileña es capaz de evadir los anticuerpos generados por una persona que ya superó el covid-19 previamente. Mientras que a mayor número de casos, mayor la probabilidad de que surjan nuevos linajes.

De hecho, Fiocruz aumentó su capacidad de secuenciamiento genético en todo el país para averiguar "si la propia P.1 también está evolucionando".

Desde el inicio de la crisis, Brasil lamenta 262.948 muertes y 10.871.843 casos, aunque se estima que el número real de infecciones es hasta tres veces mayor. "Brasil se está transformando en el mayor laboratorio a cielo abierto de coronavirus, pueden surgir un gran número de mutaciones y a raíz de eso, variantes más infecciosas y letales", alertó el científico brasileño Miguel Nicolelis, de la Universidad Duke (EE.UU.).

Vacuna brasileña

En medio del desalentador panorama, el presidente Jair Bolsonaro aseguró que "hay una vacuna brasileña en pleno desarrollo" en manos de científicos locales y los resultados preliminares de los estudios serán presentados al Gobierno de Israel por una misión que viajó a ese país para buscar acuerdos de cooperación, encabezada por el canciller, Ernesto Araujo.

El secretario de Investigación y Formación Científica del Ministerio de Ciencia, Marcelo Morales, quien participa de la delegación viajera, explicó que se trata de una iniciativa en las universidades del país con 15 plataformas diferentes.

De las 15 iniciativas, "tres llegaron con grado de madurez para iniciar, en el próximo mes, los ensayos clínicos con pacientes y una de ellas ya pidió registro en la Anvisa (Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria) y tenemos la posibilidad de interactuar con las vacunas desarrolladas por Israel", dijo Morales.

"La ventaja de tener una posibilidad de desarrollar una vacuna es que si tenemos una mutación en Brasil, nosotros dominamos la tecnología y podemos cambiar rápidamente la vacuna adaptándola a la mueva mutación y eso es un asunto de soberanía nacional", aseguró.

En Brasil están siendo aplicadas las vacunas del laboratorio chino Sinovac, la anglo-sueca AstraZeneca y la británica de Oxford. Hasta ahora el país ha aplicado 10,7 millones de dosis, según Our World in Data.

En paralelo, cada vez son más los Gobiernos regionales que han optado por endurecer las medidas sanitarias para contener el virus. Sao Paulo cerró todos los negocios, salvo los de primera necesidad.

Situación es "muy seria"

Por su parte, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió a Brasil sobre su responsabilidad en la crisis. "La situación es muy seria y estamos muy preocupados. Las medidas sanitarias que Brasil tome deberían ser agresivas, al mismo tiempo que avanza la vacunación", aseguró.

"La preocupación no gira tan sólo en torno a Brasil, sino también en sus vecinos, es casi América Latina en su conjunto. Si Brasil no se lo toma en serio, afectará a todos sus vecinos", advirtió Tedros.

75.337 casos reportó Brasil durante la última jornada, junto con 1.760 fallecidos.

Un hombre murió en violentos incidentes ocurridos frente al Congreso de Paraguay, en el centro de Asunción, cuando las fuerzas de seguridad dispersaron una concentración de centenares de personas que protestaban por la falta de insumos en los hospitales públicos y la gestión deficiente del Gobierno ante la pandemia. La jornada saldó además con 12 policías y ocho civiles heridos. En respuesta, el presidente Mario Abdo Benítez pidió a todo su Gabinete que ponga sus cargos a disposición para estudiar cambios, mientras que la oposición plantea como solución la dimisión del presidente y su vicepresidente.