Katherine Jofré S.
Casi una semana pasó una madre calameña sin saber qué enfermedad estaba afectando a su pequeña hija de dos años. La desesperación de verla decaer todos los días hizo que no se quedara con un solo diagnóstico, hasta que un médico por fin pudo confirmarle que la menor tenía el Kawasaki.
Estos días, se ha escuchado mucho esta enfermedad, ya que se asimila mucho con el Síndrome Inflamatorio Multisistémico Pediátrico (PIMS, por sus siglas en inglés). Una madre calameñas nos contó las diferencias y todo el drama que tuvo que pasar.
Testimonio
La pequeña Renata, tenía indigestión y mucho vómito, por lo que su madre Cinthia Navea la llevó a un centro de salud de la comuna, donde le diagnosticaron con urticaria.
"Le dieron corticoide y nos enviaron a la casa y al día siguiente, al revisarla estaba enronchada entera y muy roja, por todos lados, donde la derivaron a la hospitalización a una clínica de la ciudad", indicó la calameña.
Desde ese momento, fueron varios días de intensa fiebre y pese a todos los medicamentos que le daban, nada la hacía mejorar, de hecho la veía todos los días peor.
"Mi hija empezó a presentar hinchazón en las glándulas del cuello, no podía moverlo. Aparte de eso, tenía el abdomen súper hinchado, las manos y pies también muy hinchados, al grado que no se podía levantar, no podía caminar", añadió Navea.
Estuvo cuatro días hospitalizada y finalmente la dieron de alta, sin ningún diagnóstico claro. Ahí esta loína comenzó a visitar centros y médicos para poder tener alguna solución.
"Ya a esa altura, mi hija tenía los labios muy hinchados, ni siquiera podía abrirlos, se le estaban poniendo muy burdeos, casi morado. También tenía conjuntivitis, pero sin secreción", agregó.
Fue así que uno de los médicos a los que consultó dio con el diagnóstico.
"Si efectivamente tiene el síndrome de Kawasaki que es la inflamación de los vasos sanguíneos. Entonces me dijo que era muy poco común, por lo tanto, tenía que actuar rápido entonces me dijo que tenía que ir a Santiago o Antofagasta. Así que nos fuimos a Antofagasta, la hicieron pasar por delante", explicó Navea.
Fue allá donde finalmente, la ingresaron a la UCI, donde la dejaron con inmunoglobulina que es el único tratamiento para el Kawasaki. Fue ahí que lentamente comenzó a mejorar, hasta poder volver a caminar.
"Esta enfermedad genera daño en las coronarias, si es que no se logra detectar y recibir tratamiento antes de 10 días. Por lo tanto, agradezco a Dios no haberme quedado y finalmente salvarle la vida", añadió esta madre calameña.
La pequeña no quedó con daño en sus coronarias, pero deberá hacerse chequeos anuales, para que no vuelva a afectarle por esta enfermedad. En los últimos dos años, en Calama se han registrado 4 casos.
Kawasaki
Pero este síndrome, nada tiene que ver con un virus, de hecho aún se desconocen qué es lo que lo causa.
La enfermedad genera una inflamación (hinchazón y enrojecimiento) en los vasos sanguíneos de todo el cuerpo. Ocurre en tres etapas y la fiebre persistente suele ser el primer signo. Esta enfermedad afecta con mayor frecuencia a niños menores de 5 años. "Yo le digo a las mamás que sigan su instinto, no se queden solo con un diagnóstico, sobre todo en este caso, porque no pueden dejar pasar mucho tiempo. Más ahora que este síndrome se está confundiendo mucho con esa enfermedad que le está dando a los niños contagiados por el Covid-19", remató esta loína.
Y así es, el El Síndrome Inflamatorio Multisistémico Pediátrico (PIMS, por sus siglas en inglés) se le parece mucho, de hecho a principios de la pandemia se le llamó Kawasaki Simil. Pero con los meses, han estado investigando y logrando ver las diferencia.
"Son similares, pero por eso es muy importante estudiar el caso, si es que hubo contacto del niño con personas contagiadas, si es que existe un historial médico, hartas variantes. Ahora está mucho más conocido este síndrome, lo que ayuda a detectarlo", explicó el pediatra y director del Colegio Médico de Calama, Iván Silva.
Por su parte el jefe de Pediatría del HCC, Francisco Pérez agregó: "Hemos capacitado a todo personal que se maneja con paciente pediátrico desde el servicio de Urgencia hasta la UTI para poder detectar este cuadro, lo que va a generar una mejor sobrevida del paciente y evitar por supuesto las complicaciones".
"Este síndrome se está confundiendo mucho con esa enfermedad que le está dando a los niños contagiados por el covid-19"
Cinthia Navea, Madre de la menor que tuvo el síndrome Kawasaki
4 casos de Kawasaki ha tenido la ciudad en estos últimos dos años. Médicos de los servicios de urgencias han estado trabajando para saber cómo diferenciar del síndrome inflamatorio que llega poscovid.