Pobreza amenaza a mujeres con bajo nivel educativo y a los sectores medios
CRISIS. Banco Mundial proyecta que en la región las personas en esta condición subirán de 4,6% a 7,4% debido a los efectos laborales y económicos del virus.
Tras perder su trabajo como cuidadora de adultos mayores en un hogar particular, Angie González, de 37 años, oriunda de Cali, Colombia, ha pasado los últimos siete meses buscando un empleo que le permita generar ingresos para tener un mejor pasar junto a su hija de 18 años.
Sin ahorros y sin trabajo, no tuvo más remedio que irse a vivir a la casa de un amigo en el campamento Altamira, ubicado en el sector centro alto de la ciudad, sobre la población René Schneider, donde ahora intenta levantar su casa.
Su situación, relata, se ha vuelto más complicada con el correr de los meses. "Aun no consigo trabajo, busco, envío currículum, hasta en Yapo me he metido, y nada (...) la casa en el campamento avanza más o menos. Logré levantar las paredes y parte del techo con el retiro del 10%, pero me falta el piso y material de construcción para la parte de atrás".
Mientras construye su hogar, aspectos como la comida para ella y su hija son resueltos en la olla común del campamento, donde todos aportan ya sea con aportes, donativos o trabajo.
"Nueva Pobreza"
El Banco Mundial proyectó que en Chile 800 mil personas caerán en pobreza a raíz de la crisis económica originada por la pandemia del coronavirus. Solo en la región de Antofagasta, explica el informe, la población que pasará a estar en esta condición aumentará de 4,6% a un 7,4%, unas 16 mil personas, aproximadamente.
Sobre el punto, el economista y académico del Departamento de Economía de la UCN, Miguel Pérez, explicó que dentro de los grupos más afectados por esta "nueva pobreza", aparecen personas de los estratos medios y medios bajos, principalmente mujeres con un menor nivel educativo, o madres solteras.
"Si lo vemos desde la visión del mercado laboral, las personas más afectadas con la crisis, además de aquellos emprendedores que tenían su propio negocio y lo tuvieron que cerrar, han sido las mujeres que desempeñaban algún trabajo de contacto, sea comercialmente o en servicios como el turismo, debido al distanciamiento y digitalización de los procesos", explicó.
Pérez dijo que también están en riesgo las mujeres que no cuentan con educación completa y que tengan hijos, pues a ellas les costará más reinsertarse laboralmente, junto a aquellas personas que no cuenten con un manejo básico de las tecnologías.
"Es muy probable que esas mujeres también tengan algún tipo de carga familiar, lo que les dificultará poder incorporarse al mercado de trabajo de forma plena cuando esto se recupere, porque tendrán que estar al cuidado de sus hijos, más si se enferman", dijo.
Adaptación
El experto también explicó que producto de la pandemia y las medidas de prevención, las preferencias del mercado laboral cambiaron, y hoy son mucho más atractivos aquellos empleados que se han adaptado bien al teletrabajo.
"Si para algo ha servido la pandemia, es que permitió acelerar los procesos de digitalización, y eso, de alguna manera, define cuál es la mano de obra que se necesita. Evidentemente la persona deberá tener conocimientos sobre el uso de las tecnologías y la comunicación. Ese es un componente importante que seguramente tendrá un nivel de impacto en la demanda del mercado laboral respecto al tipo de cualificación que se demandará", manifestó.
Recursos
El director de Fosis Antofagasta, Mauricio Toro, explicó que los efectos de la pandemia han sido desastrosos en los estratos que ya eran vulnerables, puesto que terminó con muchos emprendimientos que aún con el apoyo el gobierno, seguían siendo precarios.
"Trabajamos con el 40% de la población más vulnerable del Registro Social de Hogares, donde gracias a un financiamiento Fndr, logramos expandir la cobertura al 60%. No ha sido fácil, la mayoría de nuestros beneficiados son mujeres, jefas de hogar, pero estamos implementando un proyecto de reactivación de emprendimientos, lo que nos posibilita llegar a usuarios de la nueve comunas", planteó.
Las ayudas, explicó Toro, están destinadas a aquellas personas más golpeadas por la crisis, en este caso quienes llevan meses cesantes.
"A través del programa Semilla, esperamos llegar a 550 familias entregando un aporte inicial para que puedan empezar un negocio. Tenemos otro 'Reactiva y Convierte', que entrega fondos a 450 emprendedores afectados. Sabemos que hay más gente afectada, hoy podemos ayudar a mil, de las más de 3 mil postulaciones que recibimos al año", cerró.